Los libros no muerden | Buenos Aires: la ciudad con más librerías en todo el mundo!

Por: Nuria Gómez Videla @nugovi

Llegó el mes de los libros. Como todos los años, la Feria del libro de Buenos Aires celebra la edición número 42 y desde este fin de semana tendrá las puertas abiertas para que más de un millón de personas -se calcula- pasen a recorrerla. Pero para aquellos que le huyen a las colas, empujones y muchedumbres, #Border les ofrece una simple opción, visitar las librerías porteñas porque pasear por ellas puede resultar tan atractivo como la lectura de un buen libro.

Por Nuria Gómez Videla (@nugovi)

Buenos Aires es la ciudad que más librerías tiene en todo el mundo. Aunque suene exagerado es así y lo afirma el último estudio de medición realizado por el World Cities Culture Forum 2014, donde Buenos Aires figura con 25 librerías cada 100.000 habitantes, le siguen, Hong Kong, con 22; Madrid, con 16; Shangai, con 15; Tokio, con 13 y Londres con 10. El resto de las urbes que van entre 10 a 3 librerías son Sidney, Nueva York, París, Amsterdam, Berlín, Montreal, Los Ángeles, Río de Janeiro, Seúl, Moscú, Bombai, y las últimas cinco, Bogotá, San Pablo, Estocolmo, Estambul y Singapur.

Ecequiel Leder Kremer es vicepresidente de CAPLA -la cámara que nuclea a los libreros- y director de la emblemática Librería Hernández, ubicada desde hace más de medio siglo sobre la popular avenida Corrientes, no me asombra que Buenos Aires lidere el ranking mundial de librerías porque existe una tradición lectora que es producto de un sistema de educación público, gratuito y laico. Además de contar con un importantísimo colectivo editorial, el circuito librero no sólo es importante en la Ciudad sino en todo el país».

Ecequiel Leder Kremer
Ecequiel Leder Kremer | Vicepresidente de Kapla y Director de la Librería Hernández,

¿Qué tiene que tener una librería para que funcione y le vaya bien, en una Ciudad como Buenos Aires? “tiene que tener suerte, conocimiento del oficio, una nutrida cartera de proveedores, tecnología aplicada a la gestión, no muchas pretensiones económicas, y una gran vocación librera y lectora”, sugiere Leder Kremer.

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En la Argentina, el mundo librero es muy variado, a simple vista se distinguen las grandes librerías que -cuentan con hasta diez locales- y las micro, pequeñas y medianas, que tienen un único local o son una herencia familiar, en general éstas se destacan por la atención personalizada. También, existen las famosas cadenas de librerías que llegaron a finales de los 90; actualmente Yenny-El Ateneo es la que lidera el sector con 16 sucursales en Buenos Aires y 24 locales en el interior del país y 2 en el exterior. Le siguen Cúspide Libros y Distal Libros.

Según el último mapa de librerías elaborado por el programa Opción Libros del Gobierno porteño en el año 2012, el barrio que más librerías tiene es San Nicolás, más conocido como Microcentro con 87, le siguen Recoleta con 45, Balvanera con 42 y Palermo con 40, aunque en los últimos dos años se estima que el número ha ido creciendo.

hernandez

Pausa & Libro & Café

En Buenos Aires las librerías han ido sumando comodidades a sus lectores y es normal leer u hojear un libro sentado en un cómodo sillón, bajo una luz perfecta, tomando café. Ni hablar de las que sumaron discos, dvds, revistas especializadas locales e internacionales y hasta comics e historietas, que como en tantas ciudades del mundo, ya tienen un espacio ganado al lado de Borges o Cortázar.

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Algunas –sólo cuatro vamos a mencionar aquí- de las librerías donde se pueden encontrar más que libros son: Clásica y Moderna, con más de 75 años, ubicada en la atractiva avenida Callao, además de espectáculos y actividades culturales, ofrece gastronomía. Eterna Cadencia, hermosa librería revestida en madera, ubicada en Palermo, ofrece una agenda variada de charlas con grandes invitados sobre lo último del ámbito literario local. Crack Up, también vecina de Palermo, lleva su nombre en homenaje a una narración autobiográfica del gran F. S. Fitzgerald, tiene mesitas para disfrutar de un excelente ambiente, buena música y excelente bibliografía. Y la estrella de la ciudad, el Ateneo Grand Splendid, una de las más lindas del mundo según el diario inglés The Guardian, convertida en librería en el año 2000, es una visita obligada para turistas y frecuentes visitantes. Conserva todo su pasado arquitectónico que supo ser cine y teatro y en su antiguo escenario –con el telón de terciopelo entreabierto– funciona un bar que invita a sentarse libro en mano. También se pueden aprovechar los sillones que están a ambos lados de la sala principal o bien ubicarse en los exclusivos palcos que funcionan como pequeñas salas de lectura. En el subsuelo funciona un sector dedicado a los libros infantiles, y el piso superior está dedicado a muestras y exposiciones.

Ateneo Grand Splendid
El Ateneo Grand Splendid
Eterna Cadencia
Librería Eterna Cadencia

El papel nunca morirá

Desde hace algunos años se debate acerca de cómo afecta la llegada del libro digital a la industria del libro. Mientras que unos se han pasado al formato electrónico por siempre y reniegan del peso que genera trasladar el libro, otros siguen eligiendo el contacto con el papel y  el olor inconfundible de la tinta impresa. Al respecto, Leder Kremer asegura, “el libro digital no ha cambiado la esencia de la lectura y tampoco los formatos del consumo. En nuestro país, y en la mayoría, el lector sigue prefiriendo la lectura en papel, más amigable y armoniosa y contenedora después de un día de trabajo plagado de instrumentos electrónicos y lectura en pantalla. Por supuesto existe un mercado del ebook, pero no ha resultado una instancia de reemplazo vertiginoso, tal como preveían algunos analistas. En el mundo de hoy, el principal competidor de la lectura tradicional no es el nuevo soporte libro, sino las series por demanda, Netflix y HBO para abonados”.

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Aquí están algunas de las librerías que podés visitar por la ciudad, y si preferís adentrarte en la feria también será una buena opción. Después de todo, los libros no muerden.  

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