El oficialismo se entusiasma con un triunfo en primera vuelta por la disputa Macri-Massa

Por: Pablo Sieira @psieira

La pelea frontal entre los candidatos de Cambiemos y UNA beneficia a Scioli. El éxito del operativo «levantar a Massa».

La pelea por el «voto útil», entre Mauricio Macri y Sergio Massa, es hoy motivo de festejo entre los oficialistas. Las chispas que se sacan los opositores pueden prender los leños que Daniel Scioli acomoda con tranquilidad, «con fe y esperanza», para el fueguito del festejo en primera vuelta.

«Se han consolidado los 10 puntos que nos permitirían un triunfo en primera vuelta», afirmó a #Borderperiodismo Miguel Pichetto, jefe del bloque de senadores del oficialismo. «Hay una diferencia muy clara», concluyó.

Si bien el senador rionegrino -que fue  uno de los primeros dirigentes del Frente para la Victoria en manifestar su apoyo a Scioli- evitó opinar sobre la pelea en la oposición, su optimismo es el que reina hoy en el oficialismo a raiz de ese enfrentamiento entre Macri y Massa.

El intento de Macri de juntar a todo el voto opositor detrás suyo tiene aires de desesperación. Incluso dentro del frente Cambiemos hay quienes critican el giro del líder del PRO para tratar de seducir al peronismo, al que rechazó en un principio: «No nos suma nada y nos resta votos gorilas», analizó una dirigente macrista en charlas informales, luego del homenaje a Juan Domingo Perón.

  Salud privada en la peor pandemia de la historia: aplausos para la tribuna y migajas en los bolsillos de los médicos

A eso se suma la campaña para reflotar el clima de «polarización» que se perdió en el último mes, con la idea de que sólo votando a Macri puede perder el oficialismo. El PRO quiere trasladarle al votante la culpa de un posible triunfo oficialista mientras defiende su decisión de haber rechazado un gran acuerdo opositor.

Movidas como éstas evidencian que, auque no lo digan en voz alta, los macristas ven que la elección se les complica más de lo que esperaban en agosto, cuando se entusiasmaron con ese 60 por ciento que voto por candidatos opositores. La piedra que Macri tiene en el zapato y se desespera por quitarse se llama Sergio Massa.

El candidato del frente UNA salió a confrontar directamente con Cambiemos. Desde el eslogan «el cambio no es una propuesta, las propuestas son el cambio», hasta el desafío a un debate mano a mano, entre segundos puestos, la campaña de Massa en este último tramo apunta a llevarse votos de Macri.

  Sergio Massa fue el candidato más votado en las cárceles

En el massismo hay opiniones divididas. Según pudo saber #Borderperiodismo, en el frente UNA están quienes creen realmente que Massa puede superar a Macri y meterse en un ballotage con Scioli, y quienes estiman que su techo es de 26 puntos, con el tercer puesto garantizado. Si el segundo pronóstico se comprueba, la estrategia de UNA habrá beneficiado a Scioli.

Esa situación es la que hoy alimenta las esperanzas del candidato del Frente para la Victoria de ganar en primera vuelta. Es que la pelea entre sus rivales lo deja muy cerca de estirar la ventaja, merced a una fuga de votos de Macri a Massa o a cualquier otro opositor.

Así, empieza a mostrar su éxito la estrategia de «levantar a Massa» que Scioli cambió por la de polarizar con Macri. Fue la que se notó cuando el candidato de UNA comenzó a aparecer, repentinamente, en los canales de televisión oficialistas.

  Encuentro de presidenciables con Magnetto: una foto muy noventas

Nadie habla de un acuerdo entre el massismo y el oficialismo, pero el salto anticipado de massistas al búnker de Scioli permite pronosticar que, con un triunfo del candidato del Frente para la Victoria, aún quienes acompañan a Massa hasta el final pasarán a las filas del sciolismo.

Y es que el peronismo siempre tiende a olvidar las rencillas pasadas y reunificarse al calor del poder. Más aún si el Presidente resulta ser un dirigente como Scioli, que abrió las puertas de su espacio para que vuelvan todos los que rompieron con el kirchnerismo y que ya comenzó a marcar diferencias con el espacio que, obligado, lo entroniza.

A menos de dos semanas de las elecciones, ocurre lo contrario a lo que se esperaba luego de las PASO: el oficialismo está tranquilo y en la oposición el río está más revuelto que nunca. Para ganancia, por ahora, de Scioli.

Suscribite a nuestro newsletter
* Recibirás emails de cada publicación semanal
Notas relacionadas
Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Con tu suscripción al Newsletter de Border Periodismo recibirás emails de cada publicación semanal.
* Recibirás emails de cada publicación semanal