La historia es archiconocida: corría 1992 y en los Estados Unidos, George W. Bush (p) era el número puesto para ganar las presidenciales. Con los éxitos en la política exterior como el fin de la Guerra Fría y de la Guerra del Golfo, su popularidad era arrolladora: 90 por ciento de imagen positiva.
Y fue entonces cuando el jefe de campaña de Bill Clinton, James Carville, tuvo la lucidez de interpretar cómo cambiar el eje de la discusión prestándole atención a los verdaderos problemas de los votantes norteamericanos.
Con la fuerza de la simpleza, escribió un cartel y lo pegó en una de las oficinas principales del equipo de campaña.
- Cambio vs. más de lo mismo.
- La economía, estúpido.
- No olvidar el sistema de salud
Cambió el foco de la discusión con una correcta lectura y Clinton ganó la presidencia. Fue así como inmortalizó la frase. Es la economía, estúpido.
Toda esta semana tuve presente esa frase porque mientras los periodistas políticos nos enfracamos en interpretar la gravedad y el alcance de los dichos del Cuervo Larroque, y en valorar las fotos que se sacan, por caso, Hugo Moyano y Mauricio Macri, la gente está en otra.
La gente común todos los días hace colas larguísimas para mal viajar en el colectivo, en el tren o en el subte. La gente tiene que resolver su vida día a día. Trabajar, usar el ingenio para hacer estirar el mango, cuidarse de la inseguridad, en fin, vivir.
Y nosotros los periodistas pero menos aún los dirigentes, no podemos darnos en lujo de no estar sintonizados con las preocupaciones de la gente común.
Las elección legislativa del año que viene o las presidenciales del 2015 no se van a ganar con el tímido crecimiento del país (proyectado en el presupuesto 2013 aprobado esta semana) y muchísimo menos con la pelea retórica de los discursos de diputados.
La verdadera pelea que va a empezar a medir para el 2015 se tiene que mudar a la gestión.
Es la gestión la que le cambia la vida a la gente y no lo que dice le Cuervo Larroque en Diputados.
Por una cuestión de gestión, Aníbal Ibarra, diezmó su prometedor futuro político cuando era jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. La tragedia de Cromagnon terminó eyectándolo de la categoría en la que jugaba.
Por una cuestión de gestión, los ferrocarriles marcaron un punto de inflexión en el propio oficialismo. La tragedia de Once, terminó con más de una década de impunidad del poderoso Ricardo Jaime y podría matar la alianza del gobierno con el poderoso grupo Cirigliano. Aunque eso, todavía está por verse.
Por una decisión de gestión de política económica, la inflación aparece hoy junto con la inseguridad como una de las principales preocupaciones de los argentinos.
Gestionar es tomar las decisiones que permitan que la política sea un instrumento ágil para solucionar los problemas de la gente.
El que parece entender eso más rápido que ahora es el intendente de Tigre, Sergio Massa. El tipo es uno de los tres políticos con mejor imagen positiva. Tiene 40 años y ya manejó la poderosa ANSESS, la Jefatura de Gabinete de ministros y ganó las elecciones en su distrito con el porcenataje récord del Conurbano Bonaerense, (73 por ciento).
Se asoma con ganas llegar en 2015 preparado para la gobernación de Buenos Aires. Se sabe de su alianza política con el gobernador Daniel Scioli y que aglutina a otros intendentes de la provincia en su propia tropa.
Massa casi nunca se enfrasca en peleas del discurso político. No aparece en programas políticos y genera todo el tiempo novedades con su gestión en la intendencia de Tigre.
Desde las líneas de colectivos diferenciales que tienen el mismo costo que los regulares y los servicios del primer mundo, hasta el hospital materno infantil que tiene una tecnología de punta y una concepción moderna sobre el parto humanizado, pasando por el omnipresente sistema de cámaras de seguridad en todos los barrios del distrito. El gestor se pone un paso por delante de sus rivales.
Con esa misma lógica el kirchnerismo apuesta ahora al ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, que sube su perfil y promete hacer cambios en el olvidado asunto de los ferrocarriles.
Tremendo desafío que tiene en sus manos. ¿Podrá realmente hacer algo superior a los parches de siempre?
Sería importante que sí.
Porque un país como el nuestro que viene de pasar por un muy buen período económico tiene que hacer espejo en la realidad cotidiana. Lo que se dice desde un atril o una banca no le importa a nadie que viaje en un subte o en un tren inseguro y abandonado. Tampoco a quienes dependen de la salud y la educación pública.
La retórica es la retórica. Con chicanas políticas no se le cambia la vida a la gente.
Eso sólo se hace con gestión.
Coincido con una sola cosa parte de tu analisis,cuando decís que la gente tiene en cuenta las soluciones a sus problemas y no a la retorica, pero yo no creo demasiado en los gestores ascéticos de ideología y mucho menos traidores y apátridas como Massa , ya que son gestores del día a día pero con un pragmatismo supuestamente des-ideologizado ,en realidad son de derecha. Como ya lo comente en otro tema, creo que se hace lo que se puede en cuanto a la coyuntura, pero la asignación por hijo o los planes trabajar o la jubilación extendida para la mayoría, son ideas macro para un país, que repercute concretamente en el día a día de la gente y sin embargo nada tienen que ver con la moderna y empresarial palabra «gestionar».
Dura Julita.
Estoy de acuerdo en el eje de la crítica.
Sin embargo esta mas q claro que sin un frente opositor de convición con cuadros políticos apolillados y sin gestión satisfactoria alguna la chicana del cuervo, al menos para mí, es fabulosa.
Olivan cada día me decepciónas más! Una pena
Si fuese realmente que el eje de la política lo determinara la gente común entonces otros serían nuestros dirigentes!
"Ni tanto ni tan poco"
Estuve escuchando y viendo toda la sesión de ese día. Muchas de las exposiciones fueron de un alto nivel de agresión (estarás al tanto seguramente) además de las consabidas chicanas. Me interesa dejar claro esto, porque me resulta muy hipócrita que el nivel de "desubicación" se mida por lo alto de la voz. Y me refiero a eso porque es una apreciación incorrecta que se vio reflejada en muchos de los que criticaron a Larroque (opositores políticos y opositores mediáticos).
Más allá de eso, considero que fue algo totalmente innecesario -los conceptos vertidos por el diputado- dejando incluso, fuera de lugar al ppio Dominguez.
Vos fijate que nadie (o al menos nadie que yo haya podido escuchar o leer) tocó específicamente estos dos puntos. Como siempre, se dio lugar a la dicotomía: O fue EL HORROR por lo que dijo O fue EL AGUANTE de la hinchada… Lo que queda para los que estamos de acuerdo con el voto a los 16, los que notamos el ALTO VOLTAJE de los dichos de varios diputados… lo que nos queda a nosotros es -sobre eso- nada.
Bueno, en cuanto a tu planteo veo que te alejás un paso, por así decirlo, y en ciertamente en lo que decís para finalizar tu post, coincido con vos. Sería en vez del pasaje al acto el pasaje a la gestión.
Considero que este gobierno tiene una gestión, y mucho por hacer, por supuesto, y también creo que, con críticas y todo, las esperanzas de un país mejor están en donde deposité mi voto… y justamente por lo se que ha hecho hasta aquí y por esto que te comenté, es que me parece -todavía- más innecesario el final de sesión del diputado…
Lamentablemente fue tan vilipendiado como aplaudido. Es decir… nada. Quedó nulo el resultado.
Y yo pienso que "Ni tanto ni tan poco".
Yo voté a este gobierno, lo aclaro porque no me voy a esconder en una neutralidad mezquina.
Analisis simplista teñido de una fuerte mirada porteñocentrica. Te olvidas que la politica es dialectica y se juega en muchisimos rubros interconectados…por otro lado, la politica no solamente la determina la "gente común", como vos llamas al ciudadano de a pie, sino un sinnumeros de grupos de poder.
Yo no hago chivos querida. Si pensás eso de mí, te agradecería que no me leas más.
Comparto con vos Maria Julia, lo que no estoy tan de acuerdo es con las prioridades que vos ponés, es lamentable que tanto vos como la gran mayoria de los periodistas se olviden que la gente que vive fuera de Capital, vivimos una realidad distinta totalmente, no es prioridad nuestra viajar como animales, porque los coles son nuestro medio de transporte, nuestros autos o los taxis, la inseguridad es un tema pero no prioritario. Nuestras prioridades son otras, pero uds, nunca las ven, a mi no me interesa lo que dice el cuervo en un atril, no me interesa la pelea con Santa fé, si comparto que me interesa la Gestión, por lo tanto me interesa lo que se hace por el pais, en cuestión de leyes y no las chicanas políticas.-
Cierren el congreso entonces, si Larroque cantaba "tirate un paso" la oposición se levantaba de la misma manera indignada, la retórica no es retórica "es la economía, estúpido" y te cito : "Cambió el foco de la discusión con una correcta lectura y Clinton ganó la presidencia" "is the rhetorics, stupid". Igual con la frase de la gente esperando el bondi le quitaste valor a cualquier argumento.
Coincido, seguimos envueltos en una gran nube de humo que nos tapa lo realmente importante. Y si vamos a ponernos críticos, que sea sobre lo que sirva y tiene impacto directo, como la gestión. Muy buena nota, Maria Julia!
No concuerdo con nada, parece más un chivo que información, bah claramente es un chivo. El final de la nota no sabías como incluirla, pero demostraste tu bolsillo, en lugar de informar
No estoy de acuerdo con tu postura, como ciudadanos debe importarnos y debemos estar bién informados sobre lo que piensan, hacen y dicen, porque son nuestros representantes. Larroque se fué al diablo con sus expresiones, debemos estar al tanto y manifestarlo. Es cierto que hay preocupaciones mayores para los laburantes, pero eso no debe ser motivo de apatía hacia los representanes porque con esa idea nos acercamos a la desideologización.