¿Qué loco, no?
El viceministro de Economía, Axel Kicillof, pidió hoy «encarecidamente» a los bancos que ofrezcan créditos hipotecarios a tasas accesibles, durante el segundo repechaje del ambicioso plan Pro.Cre.Ar que intrumenta el gobierno con financiamiento de la ANSES y del Banco Hipotecario.
También dijo que el empresario que «suspende inversiones, termina cavándose su propia fosa». Y el año pasado, el gobierno también impuso al sector que preste el 5 por ciento del total de sus depósitos a las PyMES para acompañar su crecimiento. Es decir que, siguiendo ese razonamiento el gobierno considera positivo que los argentinos tomemos crédito para crecer.
En 2012 los bancos cumplieron con la meta de prestar el 5 por ciento a PyMes y no les fue nada mal. Es muy probable que este año empiecen a recoger algún beneficio (más productos vendidos a los clientes que recibieron esos créditos) de esa política que en principio no les cayó nada simpática. Es más, algunas entidades bancarias ya pronostican que el nivel de depósitos este año será muy bueno. Mejor, incluso, que el año pasado.
Pero volviendo al razonamiento inicial, el gobierno propone que en las economías micro, los argentinos hagan lo contrario a los que se hace a nivel macro: endeudarse.
Y ahí es adonde se me presentan las contradicciones.
- Es fenomenal desendeudamiento que se produjo en nuestro país en los últimos 9 años es una de las banderas que más defendió el kirchnerismo. Con un enorme esfuerzo, el kirchnerismo logró que su deuda externa neta en dólares pase de representar un 127 % del PBI a un 20 % actual. Ahora, ¿para qué se desendeundó el país, si a la hora de seguir creciendo y de tener la posibilidad de tomar crédito a tasas bajísimas decide no hacerlo? Digo, ¿Para qué sirvió tanto esfuerzo?
- ¿Por qué un argentino medio debería recurrir al endeudamiento a una tasa que no baja del 15 % si el propio gobierno descree de endeudarse a tasas que van del 2 al 5 %?
Son preguntas simples que no me hago desde el conocimiento técnico económico sino desde el sentido común.
Miren lo que pasa en la región. América Latina ha crecido en la última década de una manera importante. Cuando un país crece, requiere inversiones que les permitan adaptarse a una economía mayor. Es obvio. Se necesitan más caminos, más exploraciones petroleras y gasíferas para que crezca la matriz energética para sostener una maquinaria productiva cada vez mayor.
Y acá viene la pregunta del millón. ¿Cómo se financia ese crecimiento?
Bueno, en la región ese crecimiento se está costeando tomando deuda a bajísimo interés. Esta semana, el Gobierno colombiano logró colocar bonos de deuda externa por u$s500 millones a un plazo de 30 años. Lo hizo al 2,7 por ciento anual en lo que representó la menor tasa de interés que consiguió el país en su historia.
En 2012, Bolivia retornó a los mercados mundiales de capital con la colocación de bonos soberanos a diez años por $us 500 millones y con una tasa de interés anual del 4,875%.
Esta semana también, Paraguay (recordemos que está fuera del Mercosur por la polémica destitución presidencial) emitió un un bono por u$s500 millones a 10 años al 5 por ciento anual.
¿Y qué hace Argentina con las obras pendientes como el subte, los ferrocarriles, YPF o incluso la infraestructura que requiere el campo para tener mejor rendimiento?
Por el momento, sigue sin querer endeudarse en los mercados internacionales y elige tomar prestado del propio estado.
El riesgo es que ese financista no llegue a beneficiar las grandes obras que requiere una economía en crecimiento, como lo es la nuestra. Si bien se proyecta un crecimiento de entre el 3 y 4 por ciento, trasladado eso a una década es un cambio muy importante.
No quiero escribir la remanida frase de que ése es el desafío pendiente. Pero ¿saben qué? Lo es.
Mal que le pese a los autores más ortodoxos del relato oficial del kirchnerismo.
El gobierno no se endeuda porque no puede, tiene cerrados los mercados (a menos que convalide tasas usureras) y ni hablar de pedir guita en el fmi. Durante los 90s eliminamos la politica monetaria porque fuimos un desastre tras otro con la maquinita, pero la deuda se descontroló. Ahora es al reves, nos estamos desendeudando fuertemente porque no queda otra y le damos a la maquinita de imprimir pesos a full.
Julia, mira la llegada que tiene el blog que leyeron y fueron a putearlo al Buquebús!!! No, chiste malo. Me encanta que acá confluimos los que comentamos y los que te mandan piropos. Qué grosso. Yo trato de cumplir las dos facetas pero no se si me sale che
otra vez lo borraste? y bueno, viva la libertad de expresión!!
Creo que no, por los motivos ya esgrimidos en algun comentario ya publicado, por ejemplo el de Yasenza. Pero postulate para presidenta, ahí quizá transe
Errata: Viceministro.
y si consigo qu le presten al 10?
No sos linda. sos la Campiña Inglesa en plena primavera!!!!!
Hola Maria Julia! El gobierno se endeuda. La politica de desendeudamiento no significa no tomar deuda, sino endeudarse desde el punto de vista que se puede pagar esa deuda en el tiempo. Como cualquiera, si uno tiene mas ingresos, se puede endeudar. Esto es lo que reflejan los numeros: pasamos de una deuda que equivalia a 144% del PBI, a una que no supera el 40% del PBI, porque la economia argentina crecio estos ultimos años, mas de lo que el gobierno se endeudó. La politica de desendeudamiento también es poder elegir al acreedor…. Hoy No solo Colombia sino Paraguay, un gobierno que subio tras un aptropello institucional, y Egypto, que no tiene dolares para pagar y hasta España, que enfrenta una crisis de deuda y crisis social , toman Hoy deuda barata. Eso significa que es una deuda segura para el acreedor? No, pero los inversores prestan igual. Porque? … Esperemos que España no caiga de rodillas ante los acreedores. Nosotros tenemos la experiencia del 2001. Es valido como opcion querer prescindir del mercado para tomar deuda, y tomar deuda, por ejemplo, interestatal, un Ejemplo es Estados Unidos, donde el fondo de jubilados esta invertido 100% en bonos del Tesoro de ese Gobierno (Para la Argentina, tomar deuda interestatal era algo imposible en decadas pasadas por la ineficiencia del Estado. Hoy se puede.) Y si eventualmente el gobierno quisiera salir al mercado, imagino que apostaraía por hacerlo financiando obras de infraestructura, tangibles. Y no financiando gasto corriente como en el pasado. Diciendo esto, es discutible si el Estado puede ser mas eficiente o no hoy con sus politicas, pero tiene un norte. Me gustaria que leas mi libro, que esta a punto de aparecer. En febrero. Se llama "Los buitres de la deuda", de Editorial Biblos. Hay algunos aspectos del "desendeudamiento" que vale la pena que otros gobiernos lo tomen en cuenta. Y desde el puro sentido común. Saludos!.
Es una verdadera locura ocultar la cuestión de la escala como si los particulares y el estado fueran la misma cosa. Es la lógica que nos ha llevado a la perdición. Todo el esquema del proyecto nacional se basa en que el dinero público no es igual que el dinero privado, no es sólo dinero que vale lo que dice el papel. Es ridículo. el estado espera que la industria mediana quede encolumnada en el proyecto de reconstrucción y quiere obligar a la banca privada a acompañar ese proyecto. Choca con el problema de que la banca privada en en realidad una banca nacional…pero foránea, cuyas políticas no obedecen a a intereses puramente economicistas, sino que buscan intensamente limitar el poder y la dirección del estado nacional .
Querida Emyei, si conseguís que a la Argentina le presten a esa tasa que le prestaron a Colombia, postulate ya como ministra de Economía porque eso es imposible. Para que te presten a esa tasa tenés que ser colombia, o sea, entregar el rosquete a los buitres financieros internacionales. Un país que quiere ser independiente, que entró en default y que mantiene un diferendo con la usura internacional no puede aspirar a esa tasa. Distinto es el caso de Bolivia. Por otro lado, la comparación entre el endeudamiento de un país y el privado es poco feliz. El endeudamiento al que aspira Kicillof mueve el mercado interno, el otro sólo alimenta la usura y la especulación. Pienso eso, pero estoy de acuerdo en que hay muchas obras pendientes que necesitan financiamiento y el gobierno debería estar preocupado en conseguirlo.
Por 2 cosas simples, María Julia (entre otras muchas que puede haber). Primero: porq la tasa de endeudamiento del Estado (algo más del 20 % de lo q «produce» el país, PBI) es razonable. La de los privados argentinos pequeños y mediados es mucho menor y tienen, digamos, capacidad de endeudamiento «ociosa». Y segundo: las tasas por las q el gobierno pugna y aconceja endeudarse internamente es baja. La externa para prestamos al Estado es baja… para otros paises. Para la Argentina no lo sería, salvo q de señales de un alineamiento a cierta «ortodoxia», q hoy politicamente no quiere dar. Es una cuestión tanto económica como política. Sldos.
Es una cuestión de fe; hasta ahora el kirchnerismo ha hecho las cosas bien, negociando con los acreedores siempre a favor de argentina. Porque no creerle a kicilof?. Aparte no te olvides qe las calificador de riesgo nos colocan por encima de grecia en cuanto al riesgo país con lo cual las tasas qe tendríamos no serían tan bajas. Y por otro lado con la volatilidad del mercado externo quizás no sea tan conveniente como parece. Así y todo se sigue creciendo a tasas razonables y todos los factores se van acoplando lentamente, productivos, infraestructura, energético, etc. Sol así el crecimiento será sostenible a largo plazo.
Endeudarse al 2 o 5%? No creo que logremos esas tasas.