Cresta Roja: el factor De Vido y por qué se llegó a la quiebra

Por: Diego Rojas @zonarojas

Cómo se llegó a la crisis que amenaza a 5000 puestos de trabajo. Qué tienen que ver Julio de Vido y Venezuela.

Nadie hubiera podido prever los acontecimientos que sobrevendrían. La noche del lunes los delegados de la empresa avícola Cresta Roja -que habían formado un acampe a la vera de la autopista Ricchieri, justo antes de la entrada al aeropuerto de Ezeiza- habían recibido una llamada de parte de uno de los secretarios de la ministra de seguridad Patricia Bullrich. Al día siguiente, martes, habrían de tener una reunión en el Ministerio de Trabajo en la que esperaban avanzar para resolver el conflicto, que llevaba ya varios meses de duración. Acordaron que no interrumpirían el tránsito totalmente y que, en todo caso, cortarían de manera simbólica dos carriles de la autopista para no entorpecer el tránsito hacia el aeropuerto. Los obreros de Cresta Roja -empresa avícola vaciada por los hermanos Rasic, sus propietarios, y que no cobraban las quincenas ni el aguinaldo en condiciones de inestabilidad extrema y sin producción en la fábrica y a quienes el Estado había dejado de pagar el fondo REPRO que equivalía a 4 mil pesos por mes- pernoctaron en una carpa improvisada con una lona para cubrirse de la lluvia y, tal como habían acordado con el gobierno, por la mañana cortaron los dos carriles. El tránsito era fluido. Sin embargo, a las diez y veinte de la mañana la gendarmería avanzó sobre ellos.Un gendarme nos avisó que tenían orden directa de Macri para sacarnos de la ruta. No era una orden del juez, decía el gendarme, sino del presidente -contó Cristian Villalba, delegado de los trabajadores-. No nos dio tiempo. Enseguida empezó la represión”. Así lo mostraron las imágenes que recorrieron el país en vivo. Los gendarmes en escuadra -y pertrechados con cascos y escudos- avanzaban sobre el grupo de cuarenta trabajadores sin dar opción a ninguna negociación. Se sumó un carro hidrante que lanzaba chorros de agua. En el canal TN la periodista Valeria Sampedro daba cuenta de los acontecimientos y narraba: Son laburantes que no tienen con qué pasar la navidad, no había razón para esto”. Los trabajadores respondieron precariamente con lo que podían. La gendarmería los reprimió y los desalojó. Se trataba del primer hecho represivo de la gestión de la presidencia de Mauricio Macri.

Cruce entre la cronista Valeria Sampedro y Guillermo Lobo durante la represión.

 

Informe de Télam sobre la represión.

Los hermanos Milenko e Ivo llegaron al país en la década del cincuenta, más específicamente en 1953, provenientes de Croacia. Aquí fundaron en 1958 la empresa Cresta Roja, dedicada a la producción de pollos para la industria de la alimentación. La marca se consolidó en el país y se popularizó mediante la comercialización de pollos congelados en todo el territorio. Según la página oficial de la compañía, para 2013 tenían: “una estructura totalmente integrada y altamente tecnificada en donde trabajan más de 3.400 personas entre profesionales y técnicos quienes atienden las distintas áreas de la organización: Cabaña “El Rodeo” origen de la genética (Ross Breeders Argentina), granjas de reproductores, molinos de alimentos, plantas de incubación, granjas de engorde, plantas de procesado; lugar donde se producen y elaboran pollos enteros, cortes, productos supercongelados, carnes marinadas y cocidas y un centro logístico responsable del abastecimiento y distribución de más de 260.000 toneladas de productos. Todos ellos elaborados bajo estrictos controles en bioseguridad en todos los procesos y aplicando procedimientos y normas reconocidas internacionalmente, pilares fundamentales para satisfacer las necesidades de los clientes y los mercados más exigentes del mundo”. Al referirse al comercio internacional, se figuraban a Venezuela, que con los oficios del entonces ministro Julio de Vido se convirtió en el principal importador de pollos de Rasic Hermanos SA.

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cresta roja espalda

Luego de la represión, se calmaron un poco los ánimos, mientras se confirmaba la realización de una marcha contra la devaluación y en favor de la lucha de los trabajadores de Cresta Roja hacia Plaza de Mayo –la medida había sido acordada entre la izquierda, la CTA y agrupaciones kirchneristas, pero luego del anuncio de un plus de 400 pesos por única vez a jubilados y beneficiarios de planes, la CTA y los K (el Movimiento Evita y Quebracho) se bajaron de la movilización (junto a Patria Grande, el partido de Itaí Hagman)-. En el acampe la tensión se percibía en el aire, pero estaba todo en paz. Hasta que llegaron los delegados de una reunión con funcionarios. En ese momento la gendarmería detuvo a un trabajador acusado de portar piedras en su mochila. Y mientras los delegados se dirigían hacia los trabajadores, un gendarme empujó a uno de los operarios. Entonces la violencia regresó. Los carros hidrantes apuntaron contra los trabajadores mientras las fuerzas del orden disparaban balas de goma. Los delegados trataban de calmar a los obreros. Luego de varios minutos la represión cesó. Los ánimos estaban caldeados y una asamblea decidió expulsar a un pequeño grupo de militantes que habían actuado por fuera de las decisiones de la asamblea, respondiendo con violencia a la represión policial e incentivándola. El resto de la militancia de la izquierda permaneció en el acampe mientras se realizaba la movilización en plaza de Mayo y luego los representantes obreros de Cresta Roja eran recibidos por el ministro de Trabajo Jorge Triaca. A las ocho de la noche saldrían del ministerio de Trabajo para dar a conocer lo tratado en la reunión.

Matan a 9 millones de pollitos por no poder alimentarlos debido al vaciamiento empresarial.

Desde 2003 hasta 2013 el negocio de los hermanos Rasic floreció como nunca. Era para la industria avícola una verdadera década ganada, pero no basada en la expansión del consumo interno de pollo, sino en las exportaciones que se dirigían principalmente a la Venezuela de Hugo Chávez. El comercio realizado entre el país y la República Bolivariana era controlado en exclusividad por el entonces ministro Julio de Vido, quien se encargaba de realizar acuerdos y sellar negocios. En el caso de la industria avícola, Venezuela pagaba el kilo de pollo un 40 por ciento más que otros importadores de tales productos, de tal modo que pagaba 2,27 dólares por kilo cuando el resto de los compradores pagaba 1,56 dólares. Nadie se preguntaba por qué el excedente mientras la industria florecía, aunque sólo las partes involucradas -el gobierno venezolano, De Vido por el gobierno kirchnerista y los Rasic- sabían qué se ocultaba detrás. El crecimiento era tal que la planta total de trabajadores se extendió hasta casi 5000 operarios, distribuidos en dos plantas en Ezeiza y Monte Grande. Pero en 2013 el precio del petróleo comenzó una caída que todavía no se detiene y, como única fuente de ingresos venezolanos, llevó a ese país a una situación de desabastecimiento y caos económico total. Los pagos por las importaciones de pollo se suspendieron y de ese modo Rasic dejó de recibir su principal fuente de ingresos, un maná que -se sospecha- estaba compuesto por exportaciones masivas al país de Chávez, ingresos con precios excesivos y retornos a funcionarios del Estado argentino y venezolano, que se sumaban a la salida de las divisas para su acumulación en el extranjero, sin destinar montos para la reinversión. Entonces la crisis llegó a Rasic por culpa del desmanejo gubernamental y empresarial. Las víctimas serían los trabajadores, que comenzaron a luchar por el mantenimiento de su fuente de trabajo, a la vez que contra los abusos patronales, que dejaban de pagarles los salarios con el beneplácito de unos delegados obsecuentes con la empresa. Todo estalló en julio de 2015, cuando se anunció el cierre de una planta, que fue tomada, y que dio lugar a un plan de lucha de acción directa, toma de empresa, cortes de ruta y movilizaciones a la municipalidad, al gobierno bonaerense y al ministerio de Trabajo nacional. El plan de lucha se llevó a cabo luego de que una masiva asamblea decidiera la expulsión de la antigua comisión interna, que fue literalmente echada a patadas. Los trabajadores lograron que el gobierno kirchnerista implementara los fondos REPRO para pagar sus salarios, mientras que la empresa abría un concurso judicial para hacer frente a las deudas. Los Rasic no destinaban ni un centavo de sus vastos negocios inmobiliarios para hacer frente a la crisis de la empresa avícola. Y no hubo plan de reorganización. El vaciamiento productivo era tal que los operarios debieron matar a 9 millones de pollitos porque no tenían con qué alimentarlos. Llegó entonces el ultimátum judicial la semana pasada, ya bajo el gobierno de Mauricio Macri: los Rasic debían presentar un plan empresarial, debían vender la compañípa a otros empresarios o se dictaría la quiebra. El gobierno discontinuó los fondos REPRO. Oficialmente la empresa tenía un pasivo de deudas por 1200 millones de pesos. El periodista Carlos Pagni escribió en La Nación que a lo largo del gobierno kirchnerista Cresta Roja había recibido “26 mil millones de pesos en subsidios”. Fondos esfumados por desmanejos empresariales y corrupción gubernamental. El plan de lucha de los trabajadores recomenzó.

  Una expropiación bien macanuda

 

cresta roja po ezeiza

El ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich denunció al PO por intentar tomar el aeropuerto.

Para aumentar la locura de un día de furia -el primer día de furia y represión bajo el gobierno de Mauricio Macri- el ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich emitió un comunicado en el que responsabilizaba por los incidentes a “infiltrados” del Partido Obrero, quienes habrían atacado a los gendarmes con la intención de “ingresar al aeropuerto Ezeiza con la intención de tomar posesión del mismo” (SIC). La jueza Valeria Pérez Casado dictó la quiebra de la compañía minutos antes de la conferencia de prensa en el ministerio de Trabajo. Al salir, el ministro Triaca anunció que el gobierno quería ayudar a los “compañeros”, término con el que se dirigió a los trabajadores. Los delegados volvieron al acampe para dar a conocer la propuesta del gobierno, que incluía reiniciar el pago del REPRO de 4 mil pesos a cada trabajador, si es que no lo había cobrado todavía. Bolsos de ayuda alimentaria para todos los trabajadores a partir del miércoles 23. Y 6 mil pesos a pagar a cada trabajador en enero, mientras el gobierno ofrecería la empresa a otros capitalistas interesados, a la vez que se ocuparía de dotar de alimentos a las granjas para recomenzar la producción de pollos. Los trabajadores aceptaron la propuesta, pero pusieron como condición la liberación del obrero detenido, que señalaron que se produciría por la mañana del miércoles.

  ¿Falta gestión? Las tensiones hacia dentro del gobierno no son sólo ideológicas

cresta roja plaza de mayo

Movilización a Plaza de Mayo en solidaridad con Cresta Roja y por bono de fin de año.
Una jornada intensa, un día de furia. Así comenzó el proceso de reordenamiento de la protesta social que anunció el gobierno macrista: con represión. El conflicto de Cresta Roja es un caso testigo para la clase laboriosa en general. De cómo avance dependerá el camino que desarrollarán anunciados futuros conflictos laborales con los que deberá lidiar el nuevo gobierno del PRO.

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