En Jujuy piensan que Milagro Sala replicó el modelo que usaba Hebe de Bonafini para quedarse con fondos destinados a viviendas sociales. Un fiscal de la provincia pidió detalles de la causa en la que se investiga a la titular de Madres porque aseguran que en las obras de la organización Tupac Amaru aplicaron el mismo sistema para presuntos defalcos. El rol de De Vido. ¿Era un plan del poder?
¿Qué tienen en común la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini y la jefa de la agrupación Tupac Amaru, Milagro Sala?
¿Su militancia social y su lucha de décadas? ¿Su adhesión al kirchnerismo? ¿Las investigaciones judiciales que pesan sobre sus espaldas? ¿Sus denuncias de que todo se trata de una persecución política montada por el macrismo?
Para el fiscal Anticorrupción de Jujuy, Joaquín Millón Quintana, tienen más que eso en común.
El funcionario acaba de pedir al juez federal Marcelo Martínez de Giorgi que conceda la vista de las actuaciones que tramitan la investigación a Hebe, los hermanos Schoklender y al ex secretario Obras Públicas, José López, entre otros, por el delito de administración fraudulenta de los fondos destinados a la construcción de viviendas en el marco del programa Sueños Compartidos.
En un escrito al que accedió #BORDER, Millón Quintana pide ver ese expediente y entrevistarse con el juez habida cuenta de “la vinculación que revisten tales hechos con las causas que se investigan en Juzgados de la provincia relativos a irregularidades presentadas en la construcciones de viviendas sociales a través de las cooperativas de la organización Tupac Amaru”.
En buen romance, el fiscal anticorrupción cree que hay muchos parecidos entre el «modus operandi» que se usó el «Sueños Compartidos» y el utilizado en el «Programa Federal de Integración Sociocomunitaria» que en Jujuy ejecutaban las cooperativas formadas por la Tupac Amaru.
Podría decirse que arriba de él el nexo último entre las dos causas era el ministro de Planificación, Julio De Vido, máximo responsable de los programas, aunque en la reciente imputación del juez Martínez de Giorgi contra Bonafini, Sergio y Pablo Schoklender, López y otros funcionarios, él quedó milagrosamente a salvo. Con una curiosidad: la causa Sueños Compartidos, en rigor, lleva su nombre en la carátula, «De Vido, Julio y otros, sobre Defraudación contra la Administración». No obstante la decisión judicial, la Unidad de Información Financiera (UIF) pidió que se revocara la falta de mérito aplicada para el ex sumperministro K.
Ya en 2014 la Auditoría General de la Nación señaló que el programa Sueños Compartidos presentaba serias irregularidades en su ejecución, que se asemejan a las investigadas en la provincia de Jujuy, en el marco de la megacausa que tiene como imputados al ex gobernador Eduardo Fellner y a Milagro Sala.
Según explicó la Oficina Anticorrupción jujeña, de las investigaciones surge como coincidencia (o no) que en los dos casos el proceso de construcción de las viviendas carecía de mecanismos de rendición de cuentas de los fondos que eran enviados desde la Nación.
Curiosamente, tanto la Tupac Amaru como la organización de Bonafini usaban un similar mecanismo de cobro, a partir de cheques de 50 mil pesos, lo que permitía evadir los controles.
Otra coincidencia es la falta de pago de los aportes previsionales. Mientras la AFIP denunció a Milagro Sala por una evasión fiscal cercana a los 177 millones de pesos, la AGN hiz los mismo con Sueños Compartidos, con una suma retenida de más de 200 millones de pesos. Y el año pasado la Justicia procesó a los Schoklender por retener aportes.
Finalmente, un último punto común es la adjudicación de las viviendas: se entregaban mayormente con documentación precaria en vez de títulos de propiedad definitivos. En particular en el caso de Sala en los últimos meses se amontonaron las denuncias de jujeños que aseguran que habían recibido una vivienda de la Tupac Amaru que luego les fue quitada por dejar de trabajar para la organización.