Lo hizo Sara Garfunkel, en su papel de querellante, al apelar el procesamiento de Lagomarsino y los custodios, para quienes reclamó se agrave la acusación en contra. También acusó a Berni, Milani, Mena y Esteche, como partícipes del “magnicidio”. Y al juez Rafecas, por encubrir el hecho. Arroyo Salgado no apeló.
La madre del fallecido Alberto Nisman reclamó que se investigue si la ex presidenta Cristina Kirchner fue parte de un «plan criminal» en el marco del asesinato del fiscal, ex titular de la UFI-AMIA.
Lo hizo en la apelación que presentaron ante la Cámara Federal apenas terminó la feria judicial de enero, a raíz del procesamiento del técnico informático Diego Lagomarsino y cuatro ex custodios de Nisman.
Sara Garfunkel pidió que se agrave la acusación contra todos ellos y vuelvan a ser indagados como partícipes necesarios de homicidio agravado, un delito que prevé hasta reclusión perpetua, según el escrito al que accedió #BORDER.
Más allá de los acusados hasta el momento, la querella consideró que Nisman fue víctima de un «magnicidio» y requiere que se investigue si CFK actuó como parte de un “plan criminal” para dotar de impunidad al asesinato del ex fiscal, orquestado en relación a su denuncia contra la ex Presidenta por el Memorándum de Entendimiento entre Argentina e Irán por el atentado a la AMIA. Con esa hipótesis, el plan incluiría hacer pasar el hecho como un suicidio y garantizar impunidad de los presuntos asesinos.
Por ello se solicitó que se investigue como un todo el homicidio, la zona liberada y las irregularidades ocurridas luego del hallazgo del cuerpo dentro del departamento de Nisman en las Torres Le Parc de Puerto Madero. Todo enmarcado en la denuncia que había hecho Nisman contra la entonces Presidenta y parte de su Gabinete por encubrimiento a los ciudadanos iraníes con captura internacional por el ataque del 18 de julio de 1994 a Pasteur 633.
«Reconocer la existencia de este plan como lo hemos expuesto a lo largo de esta causa permitirá investigar la responsabilidad que le pudo caber a la ex Presidenta de la Nación, Cristina Elizabet Fernández de Kirchner, a los grupos de choque que eran afines a su Gobierno, como el caso del grupo Quebracho«, argumentaron los abogados de Garfunkel en el escrito presentado, además de apuntar contra «grupos de inteligencia de la ex Side« e «inteligencia militar» y a «responsabilidades policiales».
En forma particular, además de la actual senadora, aludieron al ex líder de Quebracho, Fernando Esteche, al ex jefe del Ejército César Milani, a ex espías como Fernando Pocino, en un extenso listado de sospechosos a investigar que abarca además al ex secretario de Seguridad del kirchnerismo Sergio Berni y al ex segundo de la AFI Juan Martín Mena, entre otros.
También apuntaron a funcionarios judiciales que «pudieron resultar funcionales a la garantía de impunidad de la antes nombrada» al intentar que no se investigue la denuncia de Nisman, como el juez federal Daniel Rafecas -que la desestimó por inexistencia de delito- y el fiscal ante la Cámara Federal de Casación Javier De Luca, que falló en el mismo sentido.
En resumen, la madre de Nisman quiere que se investigue a todos aquellos que «resultaron funcionales» en el intento de que la causa por la muerte del fiscal «naufragara detrás de un suicidio plantado«.
Lo que la querella pretende es que se analice como un todo lo ocurrido, como un «objeto procesal en su integridad y con la dinámica propia del plan criminal« vinculado a la denuncia de Nisman por supuesto encubrimiento del atentado a la AMIA, hecha antes de morir de un disparo en la cabeza en su departamento de Puerto Madero y en la que la ex Presidenta está procesada con prisión preventiva y libre por sus fueros parlamentarios.
Por todo lo dicho, reclamó en la instancia de apelación que se revoquen los procesamientos firmados por el juez federal Julián Ercolini y se le ordene ampliar las declaraciones indagatorias de Lagomarsino y los ex custodios «para adecuar correctamente la descripción fáctica amplia y dinámica del plan criminal en el que participaron, con la expresa mención del por qué y el para qué del magnicidio perpetrado y se dispongan nuevos procesamientos por homicidio agravado», de acuerdo al artículo 80 inciso 6 del Código Procesal Penal.
La apelación estuvo a cargo del abogado de Garfunkel, el ex fiscal del fuero federal Pablo Lanusse. Su escrito fue presentado en el juzgado de Ercolini y ya se envió al segundo piso de Comodoro Py 2002, sede del Tribunal de Apelaciones.
El próximo paso de los camaristas de la sala II Martín Irurzun y Eduardo Farah será ponerle fecha a una audiencia -se calcula para fines de febrero- donde se ampliarán argumentos.
También escucharán a las defensas de Rubén Benítez, Néstor Durán, Luis Miño y Armando Niz, los custodios del fiscal muerto, cuyas defensas pidieron revocar los procesamientos por incumplimiento de deberes y encubrimiento, en alguno de los casos. Ellos también corren riesgo de ver agravada su situación procesal si prospera el planteo de la querella de madre y hermana de Nisman.
Por el lado de la ex esposa del fiscal, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado en representación de sus dos hijas, no hubo cuestionamientos al fallo de Ercolini y no fue apelado. No pasa inadvertido que su ex suegra haya tomado otra postura que desvirtuó la estrategia de Lagomarsino.
El técnico informático no apeló su procesamiento como partícipe primario de homicidio simple agravado por el uso de armas y reclamó el pronto envío a juicio oral para acabar con lo que definió como “un disparate jurídico”. O tal vez, como especulan muchos en Py, quiso evitar un eventual revés por parte de los jueces Irurzun y Farah.
El empleado de Nisman fue quien le llevó un arma la tarde del sábado 17 de enero de 2015, a pedido del fiscal, según sus propios dichos. Esa fue el “arma amiga” que según acusó el fiscal del caso, Eduardo Taiano, se usó para asesinar a Nisman en el baño de su departamento, entre la noche de ese día y la mañana del domingo.
Lagomarsino permanece libre controlado por una tobillera electrónica y cada principio de mes visita el juzgado del cuarto piso de Comodoro Py 2002 para firmar y estar a derecho
Pese a su voluntad, su situación sí será revisada y si se da la razón a la madre de Nisman, podría complicarse.
Lo que quedó claro es que el Tribunal de Apelaciones resolverá si avala la hipótesis que manejan el juez y el fiscal: que Nisman fue asesinado en un entramado criminal del que participó Lagomarsino, sin haber sido el autor directo del disparo.
Muchos de los denunciados por Sara Garfunkel están ya procesados en la denuncia de Nisman por la firma del Memorándum con Irán: la propia Cristina, Esteche (preso por este caso) y Juan Martín Mena.
El fiscal federal Taiano, también a cargo de esta causa, pedirá la semana próxima el envío a juicio oral de todos los procesados al juez federal Claudio Bonadio.
Mientras tanto la Cámara Federal de Casación recibió ya las apelaciones de Cristina, su ex canciller Héctor Timerman y los demás acusados y revisará los procesamientos firmados por Bonadio.
En lo relativo a irregularidades cometidas tras el hallazgo del cuerpo de Nisman en su departamento, ya son investigados por denuncia del mismo Taiano, Berni, la ex fiscal del caso Viviana Fein, el juez de instrucción Manuel de Campos, a cargo del caso por la muerte de Nisman en los primeros días, y a efectivos de fuerza de seguridad que estuvieron en el lugar.
Esta pesquisa se vincula a otra por la existencia de una zona liberada, abierta por denuncia de Elisa Carrió.