Es por otro incumplimiento de conciliación obligatoria, de junio de este año. La multa sería aún mayor por la reiteración. En Trabajo dicen que no habrá marcha atrás y que si Camioneros no paga, “habrá embargos”. En el sindicato apelaron y prometen un paro.

Tras las amenazas de Hugo Moyano de un paro nacional por la multa de poco más de $800 millones por no respetar una conciliación obligatoria, el Gobierno avanza con otro proceso sancionatorio, también multimillonario, por un “segundo incumplimiento de la Federación de Camioneros” que, en caso que sea constatado por la cartera laboral, desencadenaría una sanción incluso más alta por la “reiteración” de la falta en cuestión.

El enfrentamiento entre la Casa Rosada y los Moyano tiene varias lecturas: para el Gobierno se trata del “fin de la impunidad y las extorsiones” ante faltas que en otras épocas se solucionaban políticamente y también por la meta oficial de reducción de los costos logísticos que atraigan más inversiones, como el caso ya citado por #BORDER en cuanto al posible desembarco en el país de Amazon.

Para Moyano, en tanto, la pelea con Macri se origina por la oposición del gremio a la frustrada reforma laboral y porque -como expresó hoy el dirigente en una conferencia de prensa- “rompimos el techo paritario del 15%. Claro que nos tienen de enemigos: frenamos la ley y evitamos que haya sueldos de miseria».

Lo cierto es que el nuevo escenario tuvo mucho tiempo de preparación: desde principios de año, en paralelo a la tensión entre el Ejecutivo y el también presidente de Independiente, el Ministerio de Trabajo comenzó dos “procedimientos sancionatorios” contra la Federación de Camioneros. El primero tuvo su resolución el último viernes y derivó en una sanción de $809.790.710, calculada por la ley 25.212 por “haber constituido una violación a la resolución dictada, la cual fue constatada por inspectores de la cartera laboral”. Se refiere al supuesto incumplimiento de la conciliación obligatoria dictada el 26 de diciembre de 2017.

El segundo proceso se inició por la violación a la conciliación obligatoria dictada el pasado 5 de junio, cuando el gremio y la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) negociaban paritarias, el 14 de ese mismo mes.

Aquel 5 de junio el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por el plazo de 15 días hábiles ante “las medidas de acción directa implementadas por el sindicato de Camioneros. Las mismas resultaban ilegítimas y generaban un perjuicio a la buena fe negocial de las partes, existiendo un acuerdo paritario vigente hasta fin del mes de junio para el sector y encontrándose en curso las negociaciones para alcanzar un nuevo acuerdo correspondiente al período julio 2018-junio 2019”.

Al argumentar el proceso sancionatorio en trámite, la cartera informó que “constató, a través de sus inspectores, el incumplimiento de dicha conciliación obligatoria por parte del sindicato de Camioneros, accionar que constituye una violación a la resolución dictada que puede tener como consecuencia multas de entre el cincuenta por ciento (50%) y el dos mil por ciento (2.000%) del valor mensual del Salario Mínimo, Vital y Móvil por cada trabajador afectado, según lo establece la ley 25.212”.

Fuentes oficiales sostienen que el proceso está en marcha, tendrá su resolución en los próximos meses y que en caso de comprobarse, podría generar “una multa mayor porque implica una reiteración” en el incumplimiento.

Según contó una fuente gubernamental consultada, la semana próxima se concertaría una audiencia de descargo en el marco del procedimiento para que el sindicato haga su presentación ante el ministerio a cargo de Jorge Triaca.

Anoche un funcionario consultado dijo que pese a la dura conferencia de prensa ofrecida por Moyano, “no se ha pedido que se levante el pie del acelerador. La orden es continuar el proceso, que tiene un basamento legal claro y que en otros tiempos quedaba impune por negociaciones políticas”.

Esta mañana el líder camionero anunció que no pagará la millonaria multa que le aplicó la cartera de Triaca por no respetar la conciliación obligatoria y amenazó con un paro.

Acerca de una eventual medida de fuerza, el dirigente dijo que “depende del Gobierno. Está todo dentro de la pelea, dentro de la declaración de estado de alerta y movilización. Estamos en comunicación permanente (con las seccionales del interior). Si el Gobierno sigue insistiendo con estas amenazas va a llegar un momento en que decimos basta”. En su escalada de declaraciones, Moyano tildó al de Macri como “el gobierno más vergonzoso de la historia”, en una conferencia de prensa secundado por sus hijos, Pablo, de Camioneros, y «Huguito», abogado sindical, quien elevó por primera vez su perfil para considerar a la gestión actual como “de facto”.

Un allegado al camionero se animó a decir que en caso de haber una segunda multa, “iremos a un paro por tiempo indeterminado y les llevaremos los enfermos, como dijo Moyano, a la Casa de Gobierno y lo de (el ministro Jorge) Triaca. Va a haber quilombo. Sólo en la dictadura cobraban multas así a un sindicato. Tenemos 8 causas judiciales en contra. Igual hay que ver si la justicia los avala”.

Justamente el abogado de Camioneros, Rodrigo Condori, negó que hayan sido citados la semana próxima para prestar descargo ante el supuesto incumplimiento a la conciliación del último 14 de junio. “Hoy presentamos la apelación por la primera multa. Sabemos que algo tramitan por el 14 pero no fuimos notificados. Igual ese día impugnamos la notificación con un planteo de nulidad, por errores como decir que habíamos realizado asambleas en potencial, no hacen constatación. Así que si hay multa, también va a ser nula”.

El letrado sostuvo ante #BORDER que las actuaciones de Trabajo “se dan en un contexto político. No hay duda. Esta ley prevé sanciones para empresas, nunca hubo una y la hacen contra una federación de sindicatos, es decir, un órgano de segundo grado, otro error. La justicia laboral nos va a dar la razón, como cuando falló por una multa de $4 millones aplicada durante el kirchnerismo”.

Fuentes de Trabajo contradicen al abogado gremial. Sostienen que “la norma que ellos apelaron prevé pago previo. Mañana -por el miércoles- les vence el plazo y sino seguramente habrá embargo”.

Pese al enfriamiento entre el moyanismo y la CGT de los últimos meses, el último lunes el triunviro Juan Carlos Schmid apoyó al líder camionero ante la embestida del oficialismo. «Hay una cuestión muy llamativa sobre Camioneros. Margaret Thatcher con los mineros hizo algo parecido, yo no creo que el Gobierno quiera repetir esa experiencia. Que se ponga una multa me parece que no tiene ningún tipo de relación con nada. Yo siempre hablo con Moyano, pero hay algunas posturas de él que no comparto, por ejemplo el 21F”, explicó el titular de Dragado y Balizamiento.

La tensión entre el Ejecutivo y Moyano también tuvo otros disparadores. En junio Trabajo canceló la potestad del gremio de expedir certificados de libre deuda a las empresas de transporte de carga, al que semejaban a un mecanismo de control y recaudación, y que la medida se adoptó por “denuncias por extorsión de distintas compañías”.

También resultó llamativa una resolución de la última semana que habilita a los kioscos de diarios y revistas a entregar correspondencia y paquetería y “servicio de guarda y entrega de productos adquiridos por terceros a través de comercio electrónico”.

Justamente los poderosos sitios de compra-venta como Mercado Libre o Amazon pugnan porque haya en Argentina mejores condiciones de transporte y que esa competencia baje los costos logísticos. Es un objetivo que comparte la administración de Mauricio Macri y, en parte, explica la tensión con el moyanismo.