Como en cada campaña electoral, los candidatos buscan no dejar nada librado al azar y disputan el apoyo del electorado en cada espacio que se pueda: en la TV, la radio, cada vez más en las redes y, por supuesto, en la calle. Pero es aquí, en la vía pública, donde muchas de las propagandas políticas transgreden las normas y terminan metiéndose en el terreno de la ilegalidad. Tal como se desprende de un informe elaborado por el Gobierno de la Ciudad, en los últimos meses después de las PASO todas las fuerzas que compiten por la jefatura de gobierno porteña recibieron actas por la colocación de afiches ilegales en la calle, incluso el propio frente oficialista.

En total, y la cifra puede seguir aumentando hasta el final de la campaña, se registraron al menos 1.200 afiches en infracción y se labraron más de 300 actas que serán analizadas por la Justicia. Según se desprende del informe al que tuvo acceso #BORDER, con 171 actas, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT) es el partido con mayor cantidad de carteles ilegales. En la lista le sigue el Frente de Todos (con 71 notificaciones), el socialismo (56), Juntos por el Cambio (6) y el partido Autodeterminación y Libertad (con 4). No es novedad que la izquierda se ubique en el tope del ranking. En la campaña de 2017 había sucedido lo mismo, al igual que en el tramo previo a las primarias de agosto de este año.

La mayor cantidad de afiches ilegales se pegaron en los barrios del sur de la Ciudad. Monserrat se encuentra al frente de la lista con un 20% de infracciones detectadas en sus calles. Al tiempo que muy de cerca le sigue San Telmo (19.3%), Constitución (17.4%), San Cristóbal (7.9%), Villa Crespo (6.9%) y Balvanera (6.6%). “La realidad es que las personas no prestan tanta atención en la calle, muchos van con el celular u otras cosas”, detalla a #BORDER uno de los estrategas oficialistas en la ciudad, para luego agregar: “Buscamos tener presencia en los polos de mayor concentración de personas que viajen y tengan que esperar el colectivo o algún medio de transporte en la calle”. De esta manera se explica por qué en los mencionados puntos se encuentran la mayor cantidad de infracciones.

Mientras que los espacios que son víctimas de la propaganda política ilegal son, en primer lugar, los vallados de obra con un 23.8%, seguido también de cerca por estructuras publicitarias (22.3%), las cajas de luz (19.3%), los contenedores (9.3%) y las paredes en general con un 6.3%. Desde la dirección de Reforma Política, dependiente del Ministerio de gobierno porteño y desde donde se recopiló la información, explicaron a #BORDER que los fiscales que encuentran carteles en infracción le labran un acta, le colocan la cinta roja y retransmiten la constancia a la Justicia. Es allí donde se decide cuáles serán las multas -o no- que se aplicará a cada candidato. Las sanciones económicas pueden llegar hasta los $26.000 por infracción.

¿Bajó el tono de campaña en la calle? La cantidad de afiches ilegales pegados en la vía pública tuvo un leve descenso en comparación a lo que fue los días previos a las PASO. Antes de las elecciones primarias, que le darían a Larreta más del 50% de los votos, se habían registrado más de 1.800 carteles en infracción. Desde los distintos bunkers de campaña reconocen que este año la utilización de la vía pública como espacio de publicidad bajó, no sólo por el compromiso de cuidar las calles, sino más bien por las estrategias electorales en general.

Así como sucedió a nivel nacional donde los cañones de campaña apuntaron hacia las redes para convencer al electorado, lo mismo ocurrió en la ciudad de Buenos Aires. Los ejecutores de las estrategias de comunicación trataron de llegar a las personas a través de los celulares, particularmente en las cadenas de mensajes de Whatsapp o en los anuncios, fotos y videos de Facebook. Para tener dimensión, en tan sólo un día, todos los candidatos a jefe de gobierno porteño juntos gastan casi medio millón de pesos… en tan sólo un día, siendo Larreta el que se ubica primero en la lista.

Según un informe elaborado por Facebook, tan sólo en la última semana el actual jefe de gobierno porteño gastó $2.597.909 en 172 anuncios -que comprenden sobre temas sociales, de campaña y política-. Un promedio de casi $370.000 por día. El candidato de Juntos por el Cambio es, por lejos, el que más dinero invirtió en esta plataforma. De los que están en la carrera porteña, a él le sigue Matías Lammens, que publicó 32 avisos con un costo total de $420.751. Mientras que, por otro lado, Matías Tombolini -el candidato de Consenso Federal- desembolsó $344.592 en 249 avisos.

Más allá de las estrategias digitales, desde el Gobierno de la Ciudad hacen hincapié en que la cantidad de afiches en infracción también disminuyeron considerablemente desde las elecciones legislativas de 2017. En aquel entonces se superaron las 1.400 actas labradas, lo que representaba casi 30 mil avisos publicitarios que estaban pegados de manera ilegal en la vía pública. Esto había generado un pedido expreso y formal hacia cada espacio político para que revertieran la estrategia publicitaria en las calles porteñas. Los partidos se habían comprometido a firmar un acuerdo para “respetar los espacios en la calle”, aunque sin un claro resultado positivo. Dicho convenio fue ratificado nuevamente este año en junio, cuando las primeras campanas de largada hacia las elecciones empezaban a sonar.

La calle es uno de los espacios con más “barro” en la lucha entre los distintos partidos políticos. Estrategias y denuncias de las más insólitas emergen desde un lado y del otro. Hace tan sólo unas semanas desde el equipo de campaña del candidato kirchnerista Matías Lammens salieron a denunciar afiches de falsas bandas musicales que eran pegados por encima de los carteles donde aparecía el actual presidente de San Lorenzo. Al mismo tiempo, en plena época de cierre de campaña, desde el equipo de Horacio Rodríguez Larreta también denunciaron una falsa distribución de panfletos donde se anunciaba la supuesta aplicación de parquímetros en todos los barrios. “Es falso, los residentes nunca van a pagar por estacionar en sus casas”, afirmaban desde el búnker PRO. Picardías de campaña…