El empresario televisivo Adrián Suar le envió una carta a los empleados de Polka para comunicarles la difícil situación que atraviesa la compañía que dirige (y creó) hace 26 años.
“Ninguna época ha sido tan complicada como ésta. En lo personal estoy viviendo este periodo con mucha tristeza y preocupación y entiendo e imagino la angustia en cada uno de ustedes», comienza Suar en su correo electrónico.
Luego, el productor sigue: «La problemática económica de nuestra productora viene de años atrás. Aquella ‘televisión’ en la que empezamos, la que ofreció 350 horas de aire por año, la que nos posicionó como empresa líder en contenidos nacionales e internacionales, la que nos ubicó como una de las compañías de ficción nacional más importante y una de las pocas productoras con el mayor staff fijo de la región, esa televisión: no existe más«.
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En el tramo más crudo de su misiva, el protagonista de Un novio para mi mujer advierte que la cuarentena por el coronavirus, fue el golpe de gracia que su empresa recibió: «La pandemia que paralizó al mundo entero, nos paralizó a nosotros también. Nos detuvo por completo y nos inhabilitó a seguir trabajando, precipitó nuestra realidad como empresa. Ahora ya no alcanza con las ganas o con la voluntad. Hace falta mucho más que eso para poder seguir«.
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El plan de Suar para salvar Polka
Con el objetivo de evitar la quiebra, el gerente de programación de El Trece planea reducir drásticamente la cantidad de empleados de la empresa (de 300 a no más de 50) y aplicar retiros voluntarios. Además, muchos de sus servicios pasarían a ser tercerizados.
Al mismo tiempo, el titular de la productora venderá su casa de veraneo en Uruguay para hacer frente a las deudas contraídas, según consigna el portal Teleshow.
La semana pasada, los actores y actrices de la serie Separadas, que fue levantada producto de la cuarentena, suscribieron a un acuerdo por el cual cobrarán el 70% de sus contratos.
