Todos sabemos la importancia que tiene la imagen en el ámbito laboral y cómo puede influir, inclusive, en el monto del sueldo. Por eso, en estas épocas en que el home office parece haber llegado para quedarse -por lo menos de manera parcial-, no viene mal repasar algunos puntos a considerar si tenés reuniones o entrevistas de trabajo irremediablemente virtuales.
La Asesora de Imagen Kiki Fernández nos da algunos tips para tomar en cuenta: cuando toda la atención queda reducida a solo una parte de vos, ¡no te podés equivocar!
- Creá un ámbito agradable. La imagen que trasmitas será la suma de la tuya personal y la del ambiente que te rodea.
- La comunicación corporal es tan importante como la verbal. Sentate con la espalda erguida, no gesticules en exceso pero tampoco permanezcas rígid@ y, sobre todo, no cruces los brazos.
- Aunque estés en tu casa, se trata de una reunión de trabajo. Tu vestuario no debe ser muy formal pero tampoco de entre-casa. Para no equivocarte hacete esta pregunta: si tu interlocutor fuese a tu casa ¿con qué ropa lo recibirías?
- Optá por diseños minimalistas, sin brillo, no muy justados y de cuellos cómodos. La polera y la camisa totalmente cerrada no estilizarán tu imagen.
- No elijas estampados o accesorios demasiado llamativos, colores estridentes cuellos o puños desproporcionadamente grandes ni escotes pronunciados. La pantalla es chica y la atención debe de ser toda tuya.
- Para nosotras siempre es recomendable un poco de maquillaje -sobre todo corrección y un mínimo toque de color- y para ellos verse bien afeitados o con la barba cuidada.
- El pelo es súper importante. No podés lucir como si recién te levantaras pero tampoco muy formal. La consigna es que se vea prolijo.
- Los detalles son fundamentales: las uñas -para nosotras si están esmaltadas, mejor- uno o dos anillos, aros delicados y alguna pulsera o reloj para ellos, son preferibles a un look totalmente despojado. Una imagen cuidada, siempre se trasladará a tu trabajo.
- Colores: si bien lo ideal es elegir cerca de la cara los más acordes a nuestra colorimetría, lo recomendable es optar por tonos que no se mimeticen con el fondo. ¡Una camisa o blusa blanca sobre una pared también blanca, pueden hacer que parezcas una cabeza flotante!
- Tratá de dejar los piercings para tu vida personal y no muestres grandes tatuajes, aún hay prejuicios en determinados ámbitos de trabajo.
- No te acerques demasiado a la pantalla, es importante mostrar un “cuadro” más amplio. Si podés incluir todo el pecho, mejor.
- Tené en cuenta la iluminación. Nunca te ubiques de espaldas a la luz y evitá luces puntuales cuyas sombras distorsionen tu cara. Lo ideal es una luz envolvente.
- Hablá con claridad y con las pausas necesarias y tratá de no “pisarte” con tu interlocutor. Recordá que la videollamada puede no ser técnicamente óptima.
- No te dirijas a la pantalla de la compu sino a la cámara. Recordá que es muy importante mirar a los ojos a tu interloculor.
- Por último: tu perfil en las redes, tu nombre de usuario y tu mail también hablan de vos. Buscá que sean acordes a tu puesto de trabajo.
_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
Kiki Fernández es Asesora de Imagen Personal, Profesional y Corporativa.
@kikifernandezimagen