En Tecnópolis, el Frente de Todos cerró oficialmente su campaña con la presencia de la vicepresidenta Cristina Kirchner, que dio un encendido discurso.

Con guiños a Alberto Fernández (destacó su metáfora «sobre el día 99» y su mención a «los dos modelos de país» que se eligen el domingo) y un nuevo tiro por elevación a sus funcionarios («tienen que ser tercos, no tienen que bajar los brazos porque te da temor a seguir con lo que tenés que hacer»), Kirchner puso en valor el proceso de vacunación (No somos chinos, pero se levantaron 30 hospitales portátiles, y en la provincia de Buenos Aires), y aprovechó para criticar (y elogiar) la ministro de Salud Fernán Quirós.

Garchar

«El otro día, en un programa de televisión, decía un funcionario que me cae muy bien, y me parece un tipo muy serio, ‘nos llegan las vacunas y al otro día estamos vacunando’. Y claro, hermano, si tenés 207 kilómetros cuadrados y vas por calles todas asfaltadas», lo citó.

Luego, CFK cruzó a María Eugenia Vidal por la compra de su departamento valuado en más de 500.000 dólares: «A mitad de precio y arriba que el vendedor le prestó la plata y nadie le llama la atención ni nadie le pregunta nada, que bárbaro que suerte que tienen algunos y algunas. Yo vivo también en un piso en recoleta, pero salí de ahí para ir a Olivos, y volví de Olivos para ir al mismo lugar. Puedo dar cuenta», justificó. Sobre su caso, ironizó al decir que ella es una «groncha» o «morocha» peronista.

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También arremetió contra Diego Santilli, sobre quien recordó que «le hicieron un préstamo de medio millón de dólares» para comprar un departamento «y lo pudo devolver en un año».

Por otra parte, defendió a la precandidata de su espacio Victoria Tolosa Paz por el presunto «maltrato» que habría sufrido en los canales de televisión a los que fue invitada. Y le dijo: «No vale la pena. Una cosa es la discusión y otra cosa es el maltrato. Que no maltraten a una candidata o a un candidato porque es de otra ideología o porque se lo mandaron a hacer, porque no se lo merece nadie».

Las frases más salientes del discurso

• Sobre las imágenes que llegaban de Nueva York en el comienzo de la pandemia: «La escena que más me impresionó fue cuando vi camiones de refrigeración en las puertas de sanatorios para cargar cadáveres porque no entraban en las morgues. Quiero contarles que sentí mucho miedo. Y quiero contarles por qué sentí miedo, porque si esto pasa en Nueva York, ¿que nos va a pasar a nosotros en el conurbano?»
• «Yo me imaginaba hospitales en La Matanza, en Varela o en Quilmes, me imaginaba gente apilada en los pasillos. ¿Saben qué pensaba? Que iban a venir con una cámara a transmitir como se nos moría la gente porque no les podíamos dar un respirador. Eso pensé que iba a pasar. Los vi hacer cosas horribles en provincias argentinas. Y la verdad, no era yo la única que pensaba esto».
• «Hemos logrado retrasar el ingreso de otras variantes que se nos muestran como inmanejables hasta ahora. Dios quiera que se cumpla lo que piensa Nico Kreplak y no tengamos el mismo problema.
• «El Estado argentino puso mucha plata a los empresarios, trabajadores y a todos aquellos que necesitaron un auxilio económico porque estaban en la casa y no podían salir».
• Otra crítica a los funcionarios: «No solamente tienen que hablar los candidatos, tienen que hablar todos los candidatos todos los que tienen responsabilidades y que conducen el país en las distintas áreas para que sepamos de qué se trata».
• «La responsabilidad institucional no es solo de los que gobiernan, es también de la oposición, de los medios, de los empresarios, de los sindicatos, de todos aquellos que elegidos en el lugar que están tienen que dar cuenta de sus actos, y saber que un país no se construye solo y nadie se salva solo».
• «Un diputado opositor fue baleado en un acto. Imaginen si esto hubiera sucedido en Formosa. Si un diputado de la oposición hubiera sido baleado en Formosa, teníamos una caravana».