En 2017, muchos antes de presentar su renuncia como titular en la Dirección de Sida y Enfermedades de Transmisión Sexual, Sergio Maulen había dicho que la implementación de la Profilaxis pre exposición (PrEP), un tratamiento preventivo del VIH en personas en riesgo alto de adquirir el virus, no era un tema en discusión: solo debía definirse cuándo y cómo esto ocurriría. Recientemente, una medida cautelar de un juez ordenó que una prepaga cubra esta estrategia de prevención de la infección a un joven que había interpuesto un amparo. Y mientras se evalúa llevar adelante esta estrategia de manera oficial, el tema genera algunos cuestionamientos.
La profilaxis preexposición (PrEP) consiste en la toma de comprimidos antirretrovirales en personas que no viven con el VIH pero que sí tienen un alto riesgo de adquirirlo, de acuerdo a ciertos criterios médicos. Se trata de una estrategia de prevención que no reemplaza al preservativo (que protege contra distintas infecciones de transmisión sexual que la PrEP no, además de ser un anticonceptivo) pero que sí demostró ser eficaz como método para bajar la transmisión hasta un 90 por ciento y, al mismo tiempo, podría ser una opción más para frenar la epidemia.
La PrEP consiste en la toma de comprimidos antirretrovirales en personas que no viven con el VIH pero que sí tienen un alto riesgo de adquirirlo
“La PrEP es una herramienta más de prevención, que no puede ir sola, tiene que ir en el contexto de una estrategia de prevención”, explica el presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), Lautaro de Vedia. “No es universal. Es para situaciones específicas, bien controladas y de alta exposición al virus y con el objetivo de prevenir, de reducir la exposición para tratar de llegar a lo que queremos que es que haya menos casos”.
En diciembre, una medida cautelar -por el caso, algo no definitorio y que no sienta jurisprudencia- dictada por el Juzgado Civil y Comercial Federal Nº4 ordenó a una prepaga que cubra su tratamiento con PrEP para lograr la “protección de la salud” de un joven de 30 años a quien, tras dos consultas con médicos infectólogos, le informaron que estaba en condiciones de iniciar el tratamiento preventivo. La medida es novedosa, ya que, de sostenerse, implicaría que el sistema de salud debería cubrir los costos de la prevención.
Algunas de las situaciones en las cuales la PrEP podría ser indicada es en parejas serodiscordantes (cuando una persona viva con VIH y la otra no) y que busquen un embarazo; en trabajadoras y trabajadores sexuales; en personas con alguna infección repetida de transmisión sexual. Pero lejos de estos casos, crece el interés en su uso de personas que rechazan el preservativo o asumen prácticas catalogadas tradicionalmente como de riesgo como el bareback, que consiste en tener relaciones sexuales sin profilácticos, como decisión personal.
Sin embargo, de Vedia advierte: “Los aspectos vinculados con la prevención son múltiples -explica de Vedia-. Si baso mi prevención en repartir PrEP y nada más, no estoy haciendo bien las cosas. Tiene que estar acompañado de una evaluación médica, de consejería, de testeo, de evaluación de los eventuales eventos adversos, etcétera. Son muchos los elementos que hay que tener en cuenta en la prevención, no es solo tomar PrEP. No es para comprarlo en un kiosco y olvidarse”.
Hace poco, una medida cautelar de un juez argentino ordenó que una prepaga cubra esta estrategia de prevención de la infección a un joven que había interpuesto un amparo
Actualmente, la PrEP se encuentra disponible en países como Estados Unidos, Brasil, Francia, Noruega, Sudáfrica, Bélgica y Portugal, entre otros. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó, ya en 2012, la implementación de este método de prevención. ¿Cuál es la situación en la Argentina? Su aplicación, por el momento, se reduce a ensayos clínicos.
Para Matías Muñoz, abogado y presidente de la Asociación Ciclo Positivo, la implementación de la PrEP es “inminente”, pero cree que los esfuerzos en la respuesta a la epidemia debieran apuntar a otras formas de prevención: “No estamos en contra ni decimos que no se tiene que implementar, no podemos estar en contra de la evidencia científica. Hay un método de prevención que funciona y debiera ser aplicado para las poblaciones que las guías de recomendación lo dicen, pero sí creemos que el foco, por lo menos en nuestro país, con el sistema que tenemos en la Argentina de acceso universal a la salud, tiene que estar puesto en otro lugar, que es la mayor difusión del acceso al diagnóstico, porque la gente no se hace el test de VIH, y en el real acceso al tratamiento”.
“Se sabe que en los últimos años han habido faltantes de medicación que hace que las personas vuelvan a tener la carga viral detectable. Entonces no podemos pensar en comprar a precios altísimos medicación para personas que no tienen VIH, cuando en realidad tenemos personas que sí tienen y tienen la necesidad sanitaria de tener acceso a un tratamiento. Sin embargo, hay faltantes de medicación”, agrega Muñoz. La dificultad para mantener la adherencia al tratamiento y la posibilidad de que baje (aún más) el uso del preservativo son otros cuestionamientos que menciona.
La Secretaría de Salud de la Nación tiene en carpeta la realización de un estudio piloto de PrEP, que fue aprobada por la OMS y está autorizada en otros países, como Estados Unidos, Brasil o Noruega
“Nuestra crítica es al foco de la política pública -concluye-. Una cosa es que la tecnología esté disponible y otro tema es dónde se va a poner el foco, que tiene que pensarse con todos los sectores. Creo que la implementación de la PrEP en algún momento va a llegar y tenemos que ser partícipes en la forma en la que se piensa esa política”.
La Secretaría de Salud de la Nación tiene en carpeta la realización de un estudio piloto de PrEP. No obstante, todo indica que la estrategia será, en un mediano plazo, una opción en la respuesta al VIH. Una vez implementada, quedará por verse, más adelante, su efecto para bajar la cantidad de nuevos casos, cuando, en promedio, 5.800 personas por año contraen la infección.
