El secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, presentó hoy la renuncia en disconformidad por el rumbo de la política económica, y en especial en el enfoque sobre cómo atacar la inflación, según lo expresó en su carta de dimisión dirigida al presidente Alberto Fernández. Su lugar será ocupado por Guillermo Hang, hasta ahora, director del Banco Central de la República Argentina.
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La salida de Feletti se produjo luego de que se traspasara la Secretaría de Comercio del Ministerio de la Producción que comanda Matías Kulfas a la órbita del Palacio de Hacienda. El viernes, ambas carteras emitieron un comunicado conjunto en el que anunciaban el nuevo organigrama del área económica, en el que además se ratificaba la continuidad de Feletti. Sin embargo, hoy, tras un primer encuentro con Guzmán, el dirigente kirchnerista dio a conocer su renuncia.
El ahora ex funcionario le había reclamado al ministro un reordenamiento de la macroeconomía. Ese pedido incluía un aumento de las retenciones a los cereales para desacoplar los precios internacionales de los internos. Está medida fue rechazada por Guzmán en varias ocasiones lo que ahondó las diferencias. «Yo no soy mago«, había sostenido Feletti apenas unas horas de que se conociera la inflación de abril del 6%, en una crítica a Guzmán.
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La carta de renuncia
En la misiva que le envió al presidente explicando los motivos de su alejamiento, Feletti insistió en subir los derechos de exportaciones, y remarcó la principal diferencia de enfoque con el ministro de Economía. En el mismo sentido, admitió que los programas de Precios Cuidados, más los fideicomisos que propuso, fueron herramientas «pertinente y necesarias», pero que se «tornaron insuficientes».
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Feletti era una de las voces del kirchnerismo dentro del equipo económico, y su visión es compartida por el núcleo duro del espacio. En los próximos días, Guzmán tendrá su primer test frente a los empresarios, ya que deberá comenzar a diseñar la renovación del programa «Precios Cuidados», que vence el 7 de junio. La intención del ministro sería lograr un acuerdo amplio, con el objetivo de anclar las expectativas de inflación para los próximos meses.
El titular del Palacio de Hacienda mantiene la idea de lograr un consenso que incluya también a los sectores representantes del trabajo, para acordar una suba de salarios compatibles con un programa de estabilización general. Las primeras estimaciones dan cuenta de que la inflación de marzo podría ubicarse en torno al 5%, con lo cual la interanual llegaría a 60% y la proyección para 2022 se elevaría a 65%.
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