En la provincia mesopotámica, que se encuentra sufriendo la que fue calificada como «la peor sequía en 60 años», la localidad de Crespo organizó tres días de rezo para implorar por la llegada de lluvias que puedan aliviar la catastrófica situación que atraviesa la región.
“Se invita a toda la Comunidad a reunirse junto a la Gruta de Fátima en el predio de la Parroquia San José. Nos uniremos en oración para pedir por una hermosa lluvia”. Ese fue el texto con el que se lanzó la convocatoria para que los habitantes de la localidad asistan. Este conjunto de rezos fue llevado adelante desde el 16 al 18 de enero y estuvo a cargo del Padre Simón, quien bendijo a los presentes en cada una de las jornadas.
La situación que vive la provincia es devastante, principalmente desde un punto de vista económico. Y el problema es que no es algo reciente, sino que es el arrastre de varios meses de sequía consecutivos.
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Para graficar por ejemplo, en Entre Ríos un valor normal de lluvia acumulada entre junio y noviembre se ubica en 430 milímetros, un volumen sensiblemente superior a los 240 milímetros registrados en la segunda mitad del 2022. Estos números siguen manteniéndose con el comienzo del 2023, mientras los habitantes de la zona recurren a todas las formas a su alcance para pedir por lluvia.
¿FUTURO OPTIMISTA?
La sequía que afecta a la provincia de Entre Ríos y la falta de lluvias que se registra en los últimos meses, calificada como la peor de los últimos 60 años, continuará durante enero pero se moderará con el correr de los meses de verano, de la mano del fenómeno La Niña, según la Bolsa de Cereales de esta provincia.
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