Encabezando un acto en Neuquén, el presidente Alberto Fernández decidió referirse a las críticas por su silencio frente a la tensión social, política y económica del país: la suba del dólar, la devaluación, los resultados de las PASO y ahora los saqueos: «Hubo elecciones la semana pasada y todos están muy preocupados con mi agenda, ¿Qué estamos haciendo?, ¿dónde está? ¿por qué no habla?», comenzó.
«Básicamente no hablo porque no soy candidato. Básicamente no hablo porque soy el presidente y tengo que seguir trabajando y tengo que seguir resolviendo los problemas que los argentinos tienen», arremetió. «Como soy un demócrata presto atención a lo que el pueblo dice, presto mucha atención», sentenció.
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Fernández sigue hablando del pasado para justificar su gobierno: «Hubiera sido mucho mejor que nunca alguien hubiera tomado esa deuda que condicione tanto el futuro de los argentinos. Pero tuvimos que hacer frente a esa deuda, a la pandemia, a la guerra que multiplicó la inflación en todo el mundo. A la niña que trajo la sequía y ahora al niño que no para de traer la lluvia.»
Por último se refirió a los saqueos: «Aquellos que creen que es un buen modo, hemos vivido demasiada violencia en esta Argentina para volver a soportar violencia.»
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