El presidente Javier Milei expuso en el Foro Económico Mundial de Davos ante los principales líderes políticos, empresariales, culturales y de la sociedad civil del mundo. El eje de su exposición, basado, como había anticipado, en “plantar las ideas de la libertad en un foro contaminado por el socialismo”, el mandatario argentino consideró que “Occidente está en peligro” ya que “los que deben defender sus valores están coptados por una visión que conduce al socialismo y a la pobreza”.

Durante su discurso, Milei cuestionó el intervencionismo en la economía y la dependencia del Estado. “Buena parte de las ideas aceptadas en Occidente son variantes colectivistas, ya sea que se declamen comunistas, fascistas, nazis, socialistas, socialdemócratas, keynesianos, progresistas, populistas, nacionalistas o globalistas. En el fondo no hay diferencias sustantivas, todos sostienen que el Estado debe dirigir la vida de los individuos”, dijo el libertario.

Así mismo, como es habitual en sus intervenciones, Milei cargó contra  “la izquierda”, acusándola de haber “atacado al capitalismo porque dicen que es injusto. Dicen que el colectivismo es altruista, con la ajena. En mi país es una constante del discurso político desde hace más de 80 años”.

Según la perspectiva del presidente «el mercado es un proceso en el que el capitalista encuentra el camino correcto. Si el Estado lo castiga, va a producir menos y la torta se achica y hay menos para repartir», y afirmó que «los países más libres son 12 veces más ricos que los que no lo son».

Así mismo, repitió su evocación al pasado en el cual, según su perspectiva, Argentina había tenido un momento glorioso abrazando sus “el modelo de la libertad”: “Cuando adoptamos el modelo de la libertad allá por 1860, en 35 años nos convertimos en la primer potencia mundial, mientras que cuanto abrazamos el colectivismo, en los últimos 100 años, vimos como nuestros ciudadanos comenzaron a empobrecerse sistemáticamente hasta caer al puesto 140 del mundo”.

Como es habitual en sus intervenciones, Milei citó la definición de liberalismo de su amigo el intelectual Alberto Benegas Lynch (h) según la cual “el liberalismo es el respeto irrestricto por el proyecto de vida del prójimo basado en el principio de no agresión”. 

También denunció que la izquierda estaría utilizando la agenda del “feminismo radical” para poner al hombre contra la mujer, así como también el aborto como política de control de crecimiento poblacional, en línea con la agenda ecologista la cual, según su perspectiva, sería otra de las estrategias de la izquierda para intentar obtener el control político.

Los empresarios fueron el gran depositario de las loas de Milei durante su exposición, donde los ponderó como “héroes”. “El capitalista, el empresario exitoso, es un benefactor social. Lejos de apropiarse de la riqueza ajena, contribuye al bienestar general”.

Hacia el final, el presidente se dirigió a los empresarios del mundo con un mensaje empoderador: “Que nadie les diga que su ambición es inmoral. El Estado no es la solución, el Estado es el problema mismo, ustedes son los verdaderos protagonistas de esta historia y sepan que a partir de hoy cuentan con Argentina como un aliado incondicional. ¡Viva la libertad, carajo”, fue la frase elegida para cerrar su exposición.