El Gobierno nacional oficializó la decisión de que algunas empresas de salud privada retrotraigan las cuotas a los montos de diciembre y que recalculen su valor ajustándolo por inflación (IPC).
«Por disposición del Ministerio de Economía un grupo de empresas de medicina privada, que representa casi el 75% de los afiliados, van a retrotraer el valor de sus cuotas a diciembre de 2023, ajustada por IPC a partir de allí», afirmó Manuel Adorni, vocero presidencial.
La medida dispuesta por el Gobierno afecta a siete importantes empresas de medicina prepaga y hospitales de comunidad, incluyendo a OSDE, Swiss Medical, Galeno, Hospital Británico, Hospital Alemán, Medifé y Omint. Estas compañías ahora se enfrentan a la tarea de devolver dinero a sus afiliados, con la cuota que se liquidará este mes.
Según los datos aportados por la Superintendencia de Seguros de Salud, Osde tiene 31,1% de la participación en términos de cantidad de afiliados; Swiss Medical el 14,8%; Galeno el 8,3%; Omint el 4,7%; y Medifé el 3,1%.
Además, de esos datos surge que el Hospital Alemán le brinda cobertura a 58.000 afiliados y el Hospital Británico a 36.000.
Por otra parte, la resolución pone foco en «la confederación que las agrupa, la Unión Argentina de Salud (UAS); y el Sr. Claudio Fernando Belocopitt, en su carácter de actual presidente de la firma Swiss Medical S.A. y del entonces presidente de la UAS».
«Es bueno aclarar que hay una presunción (de cartelización). Cuando esa presunción de confirmarse puede tener algún impacto severo de orden público, en este caso que afecta a millones de argentinos, se dicta esta medida de tutela anticipada, para evitar que ese daño se continúe realizado», indicó Adorni sobre la composición del mercado en este sector.
Esta decisión del Gobierno nacional, aunque busca controlar aumentos desmedidos en el sector de la salud privada, generó un intenso debate sobre su implementación y sus efectos a largo plazo en los ciudadanos y el sistema de salud en su conjunto.