En una semana de turbulencias políticas, el gobierno de Javier Milei enfrenta dos renuncias significativas que ponen en evidencia las tensiones internas en la implementación de sus políticas. Además de Diego Guerendian, mano derecha del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, también renunció el joven abogado Rodrigo Puértolas, quien había asumido como director nacional de los Registros del Automotor hace apenas dos meses.

Puértolas, quien presentó su renuncia en medio de un clima de insatisfacción con los recientes ajustes anunciados por el gobierno, que llegó al Ejecutivo impulsado por Santiago Caputo, sin embargo nunca fue formalmente nombrado en el cargo, lo que añadió incertidumbre a su gestión. Según fuentes del sector, Puértolas comenzó a mostrar su descontento cuando el gobierno decidió revertir aumentos a mediados de abril. «No puedo hacer un plan de gestión en estas condiciones, todos los días hay una renuncia», se quejaba en privado.

El abogado se encontraba trabajando en un marco regulatorio para la designación de interventores y promoviendo la digitalización de los registros, pero las medidas de ajuste, como la reducción del 30% del personal y el cierre del 40% de los Registros, hicieron insostenible su continuidad. «Tenía buenas intenciones, pero la falta de apoyo y las constantes renuncias minaron su capacidad de gestión», comentó una fuente cercana.

Renuncia Guerendian, mano derecha de Cúneo Libarona.

Por otro lado, Diego Guerendiain, jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia, también decidió abandonar su puesto. Guerendiain presentó su renuncia el 10 de mayo, la cual se hizo efectiva el 13 de mayo, en medio de la ausencia del ministro Mariano Cúneo Libarona, quien se encuentra en Viena participando en una conferencia de la ONU sobre reformas judiciales.

Guerendiain, cercano a Cúneo Libarona y propuesto inicialmente para representar al Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura, citó «motivos personales» en su carta de renuncia. No obstante, fuentes del Ministerio de Justicia desmintieron cualquier rumor de disconformidad con su desempeño. «Aprecio profundamente la oportunidad de trabajar con un equipo tan talentoso y dedicado», expresó en su misiva, subrayando su amistad de más de 30 años con el ministro.

La renuncia de Guerendiain deja un vacío significativo en el Ministerio, especialmente en momentos en que sus esfuerzos estaban dirigidos a obtener apoyo en el Senado para los candidatos a la Corte Suprema propuestos por Milei. Hasta el momento, no se ha designado un sucesor para ninguno de los dos cargos vacantes.

Estas renuncias no solo reflejan la resistencia interna a las políticas de ajuste del gobierno de Milei, sino que también destacan la fragilidad de su equipo ante las decisiones del ejecutivo y las presiones del contexto político actual. Ahora, la administración de Milei deberá abordar rápidamente estos cambios para mantener la estabilidad y avanzar con su agenda de reformas.