El Gobierno nacional dio un paso más en la búsqueda por bajar la edad de imputabilidad con la presentación en el Congreso de un proyecto del libertario mendocino, Álvaro Martínez.
La iniciativa propone bajar la edad de imputabilidad de los menores a partir de los 12 años de edad. Actualmente, el Régimen Penal Juvenil contempla sanciones para la comisión de un delito desde los 16 años de edad hasta los 18.
“La situación de inseguridad que vive la Argentina es preocupante, debido al absoluto abandono de las víctimas que han hecho los gobiernos populistas y la exorbitante protección que poseen los delincuentes que no respetan ni tienen consideración por el más mínimo derecho fundamental de las personas. El desprecio a la vida, a la libertad y a la propiedad privada se ha vuelto moneda corriente”, explicó Álvaro Martínez.
Luego el diputado se explayó: “Llegó el momento de que se acaben los privilegios para los delincuentes y asesinos. Basta de impunidad y de doctrinas garantistas. Hay que dar un mensaje claro de que el que las hace las paga. Es momento de que los preocupados sean los delincuentes y no los ciudadanos “.
El artículo 1 de la normativa, además, indica que «tendrá como objeto regular los derechos del niño, niña y adolescente a quien se le atribuyere ser autor o partícipe de la comisión de una infracción penal, estableciendo los principios rectores que orienten la aplicación e interpretación de la misma y de los desarrollos normativos e institucionales que se creen para darle cumplimiento”.
Delito de adulto merece pena de adulto
Días atrás, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, había confirmado que el Gobierno intentaría que se avance con la baja de la edad de imputabilidad, que podría ser menor incluso a los 14 años. Además, ratificó que presentarán una ley anti-mafia, como las que rigen en Estados Unidos e Italia.
«Un delito de adulto merece una pena de adulto», dijo Posse durante su exposición en el Senado, donde brindó su primer informe de gestión.