La Secretaría General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) concluyó ayer que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, no respetó las disposiciones reglamentarias al publicar los resultados de las elecciones del 28 julio, y destacó que la falta de resultados detallados no tiene precedentes en la historia de las elecciones contemporáneas en el país caribeño.
El informe señala que el CNE “tampoco siguió las disposiciones legales y regulatorias nacionales, y todos los plazos establecidos fueron incumplidos”, y que “esto tuvo un impacto negativo en la confianza de gran parte del electorado venezolano en el resultado anunciado por el CNE”.
Según las revisiones llevadas a cabo por los expertos de la organización “una pequeña muestra” de actas publicada por la oposición presentó todas las características de seguridad correspondientes a los protocolos originales de resultados y que esto “sugiere que puede estar disponible una salvaguardia clave de transparencia, como se pretende, con respecto a cualquier resultado publicado oficialmente”.
Además, observaron que la transmisión electrónica de resultados, que comenzó funcionando normalmente, fue interrumpida abruptamente horas después del cierre de las mesas de votación, sin que se ofreciera ninguna explicación o información a los candidatos ni al panel de la ONU en ese momento. El presidente del CNE informó de un “ciberataque terrorista” que había afectado la transmisión, provocando un retraso en el proceso de tabulación. Sin embargo, según se lee en el informe de la ONU, el órgano comicial “decidió posponer y, posteriormente, cancelar tres auditorías post-electorales clave, incluida una sobre el sistema de comunicación, que podría haber esclarecido la posible ocurrencia de ataques externos contra la infraestructura de transmisión”.
El 28 de julio, el CNE declaró ganador a Nicolás Maduro con el 51,2% de los votos, pero aún no publica los resultados desagregados que confirmen la victoria. Un silencio que ha sido cuestionado por numerosos países y organizaciones, e incluso por uno de los observadores autorizados de la elección, el Centro Carter. Los resultados terminaron con protestas en las calles. Hasta ahora hay 25 muertos, 192 heridos y más de 2.400 detenidos. Las manifestaciones contaron con la participación activa dela líder opositora, María Corina Machado, y el candidato presidencial, Edmundo González Urrutia, quien afirma, junto a una parte importante de la población venezolana, ser el verdadero ganador de los comicios.
“Los anuncios de resultados consistieron en comunicaciones orales sin apoyo infográfico. El CNE no publicó, y aún no ha publicado, ningún resultado (o resultados desglosados por mesa de votación) para respaldar sus anuncios orales, según se contempla en el marco legal electoral”, dice el texto de la ONU.
El panel de la organización dijo también que tras el anuncio de los resultados, “a pesar de haber presentado una solicitud formal, no pudo reunirse con la Junta Directiva del CNE antes de su partida”. El informe cuestiona además las continuas “restricciones al espacio cívico y político” que se vivieron antes de las elecciones, y el hecho de que el régimen chavista “monopolizó los medios de comunicación estatales, dejando un acceso muy limitado a los candidatos de la oposición”.