En la habitual conferencia de prensa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, sostuvo: “Hay un convencimiento de que hay cosas en la Argentina que no funcionaban y una de esas era el sistema energético, especialmente el eléctrico”.
“Todos sabemos muy bien que hubo un sistema de desinversión en 20 años que pulverizó el sistema energético. Ni hablar de los 30 mil millones de dólares de déficit energético en los últimos 30 años que estamos corriendo, y que ya es positivo, de hecho es superavitario”, justificó.
“La economía ajusta por dos variables: precio y cantidad, si sostenes el precio indefectiblemente ajusta por cantidad. Si tenés un precio fijo lo que ocurre es que ajusta en las cantidades”, describió, y completó: “A mismo precio se bajan las cantidades ofrecidas o la eficiencia o lo que puede ofrecer el sistema energético”.
Tras los aumentos que empezaron a regir desde el 1 de agosto de hasta un 4% las tarifas de los servicios públicos de electricidad y gas natural por redes, Adorni remarcó: “Fueron tarifas fijas versus cantidades que cada vez fueron menos y que nos fuimos quedando sin energía. En promedio, en los últimos 10 hemos tenido un déficit de 3 mil millones de dólares por año o 30 mil millones de dólares en todo el período”.
“Hay un convencimiento de que las tarifas tenía que tener una corrección. Lo demás preguntádselo a la gente”, concluyó el vocero.
El cruce con Fabián Waldman
Manuel Adorni tuvo esta mañana otro de sus clásicos intercambio con el comunicador, uno de los periodistas acreditados para las conferencias de prensa matutinas.
En esta el disparador fue una pregunta sobre las tarifas de los servicios: “¿Cómo hará la gente para pagar?”.
«Es una pregunta retórica, porque en definitiva… ¿cuál sería la respuesta?”, contestó Adorni, con otra pregunta.
«La respuesta es cómo va a pagar la gente…», intentó conducirlo el periodista, pero Adorni lo encimó con sus palabras y con la lógica de la ideología libertaria lo llevó al terreno de la resolución individual, o el caso por caso: «Teniendo 15 millones de medidores, o de servicios de luz domiciliarios, no sé… ¿qué te tengo que responder?».
Waldman le dijo que tenía frío y avanzó un casillero: le pregunto si la clase media iba a tener que recurrir a sus ahorros para pagar los servicios.
Adorni adoptó tono recatado y dijo que cree «que hay un convencimiento de que hay cosas que en la Argentina no funcionaban y una de esa cosas era el sistema energético».
