Antes de que el juez Ariel Lijo se presente en el Senado de la Nación para presentar su candidatura para ocupar un lugar en la Corte Suprema, la vicepresidente Victoria Villarruel se mostró en contra y elevó la tensión interna con Javier Milei y su entorno más cercano, quienes optaron por Lijo como uno de los candidatos para ocupar las bancas vacías.
”Hubiera querido tener un candidato sólido y que nos represente, con la mejor sabiduría y rectitud posible. No creo que sea el caso”, dijo la también titular del Senado en un almuerzo con miembros del Colegio de Abogados.
“No tiene los pergaminos para ser juez de la Corte”, dijo a horas de que la Comisión de Acuerdos del Senado de la Nación reciba al juez, el miércoles a las 10 de la mañana.
Hasta el momento, según un informe difundido por el Ministerio de Justicia, Lijo pudo juntar hasta 3578 adhesiones y 328 impugnaciones tras la postulación del Poder Ejecutivo.
Horas antes, Milei apuntó contra Francisco Paoltroni, el senador de La Libertad Avanza que apuntó contra el asesor presidencial Santiago Caputo y la decisión de elegir a Lijo como uno de los candidatos. En ese sentido, el Presidente aseguró que es «gente que no entiende nada».
De esta forma, la interna en el gobierno se profundiza y pone en peligro los consensos puertas adentro, además de poner en el ojo de la opinión pública al círculo más chico por el que se rodea Milei.
