Un plenario de las comisiones de Educación y de Presupuesto y Hacienda del Senado emitió dictamen al proyecto de ley que garantiza el financiamiento de las universidades nacionales actualizando sus presupuestos según el índice de inflación.
La iniciativa fue aprobada hace dos semanas por la Cámara baja y el presidente Javier Milei ya anticipó que la vetará en caso de que la Cámara alta la convierta en ley.
La intención de la oposición es convertir el proyecto en ley este miércoles, a pesar de las gestiones de Victoria Villarruel, que pretendía evitar que la Cámara alta sesione para impedir que el Gobierno sufra una nueva derrota legislativa que podría ser doble, ya que también está listo para su discusión en el recinto el rechazo al DNU que amplió en $100.000 millones las partidas para gastos reservados de la SIDE.
Las voces de los legisladores
El despacho consiguió el apoyo de casi todos los bloques legislativos. Las excepciones fueron el jefe del bloque oficialista, Ezequiel Atauche (Jujuy), que consideró que el proyecto afectará la política de reducción del déficit fiscal que impulsa el Gobierno, y la cordobesa Carmen Álvarez Rivero, miembro del bloque Pro pero cada vez más cercana a las posturas del oficialismo.
La pelea entre el Poder Ejecutivo y las universidades nacionales viene desde inicios de año y se tradujo, el 23 de abril último, en la primera gran marcha en contra del Gobierno de Milei, que concitó el apoyo de casi todas las fuerzas políticas y terminó con un acto en la Plaza de Mayo.
El proyecto que aprobó la Cámara baja le ordena a la administración nacional recomponer el presupuesto de las casas de altos estudios en base a la inflación informada por el Indec, acumulada entre el 1° de diciembre último y el momento de la sanción de la ley. A partir de ahí, la actualización se hará de manera mensual, también por inflación.
La oposición
El presidente de la Comisión de Educación, el kirchnerista Eduardo De Pedro (Buenos Aires), defendió la iniciativa y aseguró que se trata de “una señal para que el Gobierno tenga como prioridad esta inversión, porque no es un gasto”.
En ese sentido, aseguró que la propuesta apunta a darle a las universidades la posibilidad de “recomponer el presupuesto en materia de funcionamiento, de salario, de becas, de obras y para el sistema científico y tecnológico”.
Según De Pedro, la inflación acumulada desde noviembre del año pasado hasta el último mes de julio ascendió al 135% y lo contrastó con el aumento salarial universitario que, dijo, “fue de apenas el 57%”. “Eso significa que el poder de compra de los docentes bajó al 33%”, dijo.
Le salió al cruce el oficialista Atauche, que es presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, quien afirmó que destacó “la importancia que el gobierno de Milei le está dando a la educación” antes de defender la política de conducta fiscal del Poder Ejecutivo.
Al respecto, y en línea con el discurso oficial, Atauche dijo que no sólo es importante conocer los niveles de actualización de las partidas presupuestarias, sino que también lo es que se “sepa en qué se usan los fondos de todos los argentinos”.