Buenas noticias para el gobierno de Javier Milei. El dólar blue bajó a $ 1215, se desplomó el Riesgo País y las acciones crecieron hasta 9 %. Este escenario entusiasma a inversores por los activos financieros argentinos e impacta positivamente en el mercado cambiario, además de que reduce la brecha. Además, el ingreso de divisas por el blanqueo impacta positivamente en el banco Central, ya que las reservas volvieron a superar los U$S 29.000 millones.
En paralelo, las tasas de interés se mantienen en terreno positivo e incluso algunos bancos comenzaron a subirlas para atraer depósitos y poder hacer frente a una mayor demanda de crédito.
En línea con esto, el dólar MEP cerró a $ 1.159 y el contado con liquidación a $ 1.182.
La reducción de la brecha cambiaria abre la expectativa a nuevas medidas que alivien las trabas que se mantienen para la operatoria cambiaria. Dependiendo de la cotización que se tome, la diferencia con el dólar oficial apenas se ubica entre el 15% y el 18%.
Los agentes del mercado parece haber aumentado su confianza, se dispararon las cotizaciones las acciones y los bonos hasta 9 % en Wall Street, otra vez en sus niveles máximos de 2024, con protagonismo de los papeles bancarios: Banco Francés (+9,3%), Banco Supervielle (+8,4%), Banco Macro (+8,3%) y Grupo Galicia (+6,3%).
Ayer se conoció que Argentina no cayó en la “lista gris” en materia de lucha contra el lavado de dinero del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI). El organismo aprobó el Informe de Evaluación Mutua presentado por el país, lo cual fue festejado por el Gobierno de Javier Milei. La declaración habilita a inversiones de compañías extranjeras que, de otro modo, hubieran estado vedadas de operar por las restricciones legales de sus países de origen.
El clima de optimismo financiero se tradujo en nuevos máximos en la cotización de los títulos públicos. En cuanto a las acciones argentinas, el S&P Merval -el índice bursátil más representativo de la bolsa argentina- de la Bolsa de Buenos Aires subió un 4,3%, a 1.849.995 puntos, para quedar muy cerca de su récord nominal de septiembre.
El ministro de Economía, Luis Caputo, había confirmado al medio Financial Times que Argentina consiguió un préstamo de casi tres años con bancos privados, para afrontar el pago de capital de deuda a bonistas y comunicó que el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) van a otorgar financiamiento por USD 8.800 millones para proyectos en Argentina.
Además, el Riesgo País, el índice económico que mide el riesgo que representa un país para los inversores volvió a tocar mínimos que no se veían desde agosto de 2019. Este cambio de tendencia se explica en gran medida por los avances de una nueva negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las compras de reservas del Banco Central (BCRA) y los nuevos desembolsos por parte del Banco Mundial y el BID.
Estas noticias son alentadoras para el gobierno, que le permitiran extenderla “primavera financiera” que viene de agosto, a pesar de la fuerte caída en la actividad económica, particularmente en el sector industrial.
