Según el ministro de Regulación y Transformación, Federico Sturzenegger, desde la asunción de Javier Milei se redujeron 33 mil puestos de empleados pertenecientes a la planta estatal en diversos organismos.
Esto lo resaltó Sturzenegger, quién a través de su cuenta personal de «X» resaltó como fue la reducción de personal en varios sectores del Estado argentino y explicó en su mensaje el motivo de este proceso administrativo.
“La única manera sustentable de bajar la carga de impuestos es bajando el gasto público. Todo el equipo del presidente Javier Milei trabaja para ello. Acá el gráfico con la variación en la planta de empleados públicos actualizada a septiembre”, escribió el funcionario a quien el mandatario encargó el objetivo de achicar al sector público.
En el gráfico que acompañó la declaración, el ministro mostró la evolución de la planta de empleados públicos, señalando que, de los 33.291 puestos eliminados, 20.026 pertenecen a la parte de administración central y descentralizada, 2.251 al personal militar y de las fuerzas de seguridad, y 11.014 a empresas del Estado.
En el comienzo de su mandato, Javier Milei había declarado que su idea era desprenderse de 70 mil empleados de la planta estatal. “No sólo que se redujeron a la mitad la cantidad de ministerios; eliminamos las transferencias discrecionales a las provincias, la obra pública, los contratos. No solamente eso, sino que una de las cosas que nosotros sabíamos era que el programa iba a generar tensión social y, también, una caída de la actividad”, aseguró el mandatario nacional en un discurso que realizó hace unos meses en junio dentro de un acto en Parque Norte.
Los despedidos más recientes durante la administración de este gobierno vinieron por la «eliminación» del AFIP y su reemplazo con el ARCA (Agencia de Recaudación y Control Aduanero) en su lugar. Este movimiento llevo a la destitución de aproximadamente tres mil empleados públicos que conformaban a la institución del estado. Aún así no fue la mayor cantidad de despidos en este año ya que en Enero se desvinculó a 7.607 personas y en abril fueron al menos 7.000 agentes, entre los que se incluyen cortes de contratos, retiros voluntarios y jubilaciones.
