El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, fue entrevistado en el canal La Nación Más donde se refirió a la salida de la ahora ex canciller Diana Mondino. Según el funcionario, el presidente Javier Milei “es muy celoso de su posición internacional y no admite ningún movimiento personal en contra”, y aseguró que Mondino no consultó antes de expresar la posición de Argentina en la votación de la Asamblea General de las Naciones Unidas sobre el embargo económico a Cuba. Mondino votó en contra, lo cual le valió que el primer mandatario, cuya posición oficial es a favor del embargo, votara a favor del mismo.
“Si hay un tema es que el Presidente ha fijado su posición con claridad, pero en este caso en particular, fijó un alineamiento de entrada con Estados Unidos e Israel. Quedar desalineado en un voto con esa posición al presidente lo consideró inconsulto”, dijo Francos, y agregó: “Ella (Mondino) tiene una explicación en base a la tradición del voto en este caso. La política exterior no lo aplica ni la canciller ni la cancillería, son asesores del presidente. El que toma las decisiones es el Presidente y consideró que había excedido los límites de una posición del país que le correspondía a él y por ese motivo generó este cambio”.
Francos anticipó que Gerardo Werthein, sucesor de la ahora ex canciller y hasta ahora embajador en Estados Unidos, permanecerá en el país del norte hasta las elecciones locales previstas para el próximo 5 de noviembre.
“La política exterior argentina no es independientemente del Gobierno Nacional. El Presidente fija una posición porque le corresponde hacerlo constitucionalmente y el equipo en cada uno de los ministerios tiene que responder a eso”, puntualizó Francos.
En otro pasaje, se refirió al paro de transporte realizado ayer, miércoles, y lo calificó de “huelguita”.
“Es un paro político que tiene esa intención. Hace un mes atrás decían que el Gobierno había perdido imagen, pero ahora todas las consultoras dicen que el Gobierno recuperó imagen porque hubo resultados económicos, que es un proceso”, dijo, y agregó que los dirigentes que lo impulsaron “tienen pánico de que al Gobierno le vaya bien porque si eso sucede se le acabaron los curros”.
«No creo que los inversores que están planificando venir a la Argentina, se vayan a retirar por una huelguita de cinco tipos que quieren generarle un problema al Gobierno», dijo, y sentenció: “Fue una huelguita. La gente se levantó tres horas y media antes para ir a trabajar».