La dirección de Aerolíneas Argentinas informó la suspensión de las negociaciones salariales con los gremios de pilotos, tripulantes y personal de rampa y check-in luego de que recientes medidas de fuerza afectaran una gran cantidad de operaciones de la empresa.
A través de un comunicado oficial que emitió la empresa esta mañana, se indicó que la decisión responde a las acciones del gremio de pilotos APLA (Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas), que en los últimos días canceló varios vuelos internacionales de largo alcance. En el comunicado se explica que la compañía había retomado el jueves pasado la mesa de negociación salarial con APLA, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), un encuentro en el cual también participaron altos funcionarios del área de Transporte y de la Jefatura de Gabinete.
Los secretarios generales de los sindicatos implicados habían solicitado la reapertura de las paritarias en varias oportunidades, y el objetivo de estas reuniones era encontrar una solución conjunta, evitando mayores perjuicios para los pasajeros. Hacía dos meses que no se avanzaba en ningún tipo de negociación. Sin embargo, la misma se frustró: durante el fin de semana APLA, liderado por Pablo Biró, optó por medidas que resultaron en la cancelación de cuatro vuelos internacionales, afectando a 2.178 pasajeros varados, afectando sus planes de viaje.
La dirección de la empresa señaló que APLA no mostró interés en evitar las cancelaciones y describió las medidas de APLA como una “provocación irresponsable”, asegurando que los líderes gremiales usan el conflicto salarial para vehiculizar una contienda de carácter político, sin reparar en el dañoa los pasajeros ni en el funcionamiento de la aerolínea.
El conflicto entre la empresa y los gremios se recalentó en las últimas semanas, a partir de los paros organizados por el sindicato en el Centro de Formación y Entrenamiento de Pilotos de la República Argentina (Cefepra), que opera en Ezeiza, los cuales interrumpieron la instrucción y renovación de licencias para los pilotos de larga distancia, capacitación que deben realizar cada seis meses. Esto desembocó en que la aerolínea debió operar con una falta de personal calificado para rutas de larga distancia, afectando el servicio en varias rutas internacionales. En los próximos meses, temporada de vacaciones de verano y fiestas, la demanda de vuelos suele aumentar y se cree que esto hará recrudecer el conflicto.
APLA responsabilizó a la dirección de Aerolíneas Argentinas por la falta de avances en las negociaciones salariales y cuestionó a los directivos Fabián Lombardo, gerente general de la empresa, y Juan Pablo Alvarado, subgerente, alegando que la actual gestión no posee la experiencia necesaria para resolver los problemas de la aerolínea. También denunciaron un deterioro en las condiciones laborales de sus afiliados y exigen un aumento salarial del 90% para cubrir la pérdida de poder adquisitivo desde mayo de 2024.
Además, la dirección de Aerolíneas Argentinas advirtió en su comunicado que realizará denuncias ante las autoridades gubernamentales y judiciales por el perjuicio económico que las medidas del gremio le generan a la empresa. Y es que la reubicación de pasajeros y la contratación de vuelos adicionales repercuten en un incremento en los gastos de la empresa estatal.
