La película pronto captó una gran audiencia en Netflix, acumulando 3,2 millones de visualizaciones y posicionándose entre los 10 títulos más vistos en varios países, incluida Argentina.
Basada en hechos reales, la historia recrea el secuestro de un avión en Lagos en 1993, donde cuatro hombres tomaron como rehenes a los pasajeros en nombre de una transformación social en su país.
El secuestro de 1993 es un largometraje nigeriano que relata el secuestro de un Airbus A310 de Nigerian Airways, que realizaba el trayecto de Lagos a Abuja. Este acto fue llevado a cabo por cuatro adolescentes que buscaban impulsar una revolución en Nigeria. Dirigida por Robert O. Peters, la película se estrenó en Netflix el pasado 25 de octubre de 2024.
El caso real
Richard Ogunderu, Kabir Adenuga, Benneth Oluwadaisi y Kenny Rasaq-Lawal abordaron un vuelo originalmente programado de Lagos a Abuja, que transportaba a altos funcionarios, entre ellos Rong Yiren, vicepresidente de China, y miembros del gobierno nigeriano.
Los secuestradores planeaban desviar la aeronave hacia Frankfurt, Alemania, pero debieron hacer una parada para repostar en Niamey, República de Níger. Al aterrizar en el Aeropuerto Internacional Diori Hamani de Niamey, declararon que habían tomado el vuelo en nombre del “Movimiento para el Avance de la Democracia en Nigeria”.
Demandaron que el gobierno interino, respaldado por los militares en Nigeria, renunciara y que Moshood Abiola fuera nombrado presidente. Amenazaron con incendiar el Airbus A310 en un plazo de 72 horas si sus exigencias no eran cumplidas.
Tras dos horas de negociaciones, liberaron a 129 personas, incluido Rong Yiren, pero retuvieron a la tripulación y a los funcionarios nigerianos. Mantuvieron su amenaza de incendiar el avión en 72 horas si las autoridades no cumplían con sus demandas, que incluían la dimisión del gobierno militar.
Finalmente, tras cuatro días, los gendarmes intervinieron, arrestando a los secuestradores, quienes pasaron 9 años y 4 meses en prisión en Níger. Poco después del secuestro, el gobierno interino de Ernest Shonekan fue reemplazado por la dictadura del General Sani Abacha.
Diferencias con la película
La cinta presenta algunas variaciones respecto a los hechos reales. Por ejemplo, en la película se muestra la muerte de un pasajero, aunque en realidad no hubo víctimas fatales. Además, mientras que en la vida real el vicepresidente de China estaba a bordo, en la dramatización es el hijo del embajador chino quien se encuentra en el avión. Al inicio de la película se indica que existen varias diferencias respecto a los hechos reales.
Cuestiones a tener en cuenta al ver El secuestro de 1993
El avión despegó de Nigeria con destino a ese mismo país; sin embargo, al ser secuestrado, los secuestradores exigieron que se dirigiera a Frankfurt, aunque el avión no tenía suficiente combustible, lo que llevó a un aterrizaje en Níger.
En la versión en español, ciertas partes pueden resultar confusas debido a errores de traducción. Es útil recordar que el idioma oficial de Níger es el francés, mientras que en Nigeria es el inglés, y que los gentilicios son “nigerino/nigerina” para Níger y “nigeriano/nigeriana” para Nigeria.
El secuestro de 1993 se destaca no solo por narrar un hecho real que puede resultar ajeno a las personas de Latinoamérica, sino también por ser una representación del cine nigeriano, un ámbito que rara vez recibe la atención que merece en el panorama cinematográfico global.