Mientras se registran datos positivos en toda la macroeconomía de Argentina, el Gobierno pagó el último vencimiento de intereses del 2024 con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por más de 790 millones de dólares.
Las reservas, que venían con una larga racha positiva en las últimas semanas, se vieron afectadas y cayeron a US$ 29.677 millones de dólares. A pesar de esto, la recuperación de los fondos del Banco Central sigue siendo contundente desde la llegada de la gestión libertaria.
A diferencia de la anterior administración, el pago se realizó con fondos propios, sin necesidad de acudir a otros créditos de organismos multilaterales ni del FMI, ya que hasta el momento no se liberaron US$ 532 millones pendientes de pago por parte del Fondo.
Por otro lado, cabe destacar que esta parte de la deuda se canceló sin la cuestionada reducción de sobrecargos que se aprobó recientemente para los pagos del próximo año.
En estos momentos, el gobierno de Javier Milei estaría cerca de establecer un nuevo acuerdo con el organismo que dirige Kristalina Giorgieva, con la intención de conseguir nuevos desembolsos para el 2025, cuando vencerán US$ 3.300 millones de intereses. En el caso contrario, el país dejará de recibir los desembolsos y deberá hacer los pagos desde las reservas.
Desde la victoria de Donald Trump en Estados Unidos el pasado martes, las expectativas de la administración libertaria aumentaron con respecto a la posibilidad de que se de un nuevo acuerdo que delimite nuevas metas de cara al resto de la deuda.
Actualmente, el país tiene pendiente la aprobación de las últimas dos auditorías del segundo y tercer trimestre del 2024. Este es el motivo por lo que todavía se adeuda por parte del Fondo el desembolso de US$ 532 millones, correspondiente al segundo, y US$ 550 millones, del tercero.