El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se refirió a la fallida sesión de este jueves en el Congreso en la que el PRO y aliados, entre ellos buena parte del oficialismo, no lograron el quórum para debatir la ley de Ficha Limpia. Luego de aclarar que el Gobierno está de acuerdo con la idea central del proyecto, también puso reparos: “Puede interpretarse como una proscripción”.
En la última sesión ordinaria del año de la Cámara de Diputados, los legisladores amarillos no lograron reunir el apoyo necesario y, concluido el tiempo, Martín Menem debió levantar la sesión. El proyecto, impulsado por el PRO, no obtuvo tampoco la totalidad del respaldo libertario y perdió estado parlamentario, por lo que deberá volver a tratarse en comisiones.
“Estamos de acuerdo con Ficha Limpia y con lo que significa”, dejó en claro Francos, horas después del naufragio legislativo del proyecto, pero aclaró los riesgos de su sanción: “Con lo que quizá no estamos de acuerdo es que puede llegar a interpretarse como una proscripción”.
En diálogo con el canal TN, Francos puso como ejemplo un hecho histórico como fue la proscripción del peronismo durante una parte del siglo XX. “En algún momento trascendió que el propio presidente había dicho ‘Acuérdense cuando lo proscribieron a Perón en 1955 que después volvió’”.
En esa línea, comparó aquel hecho con la situación que atraviesa la expresidenta Cristina Kirchner. “No hagamos una especie de profecía que al tratar de que se le aplique esta norma a la expresidenta como pretenden algunos estemos haciendo una especie de proscripción que después genere lo contrario”, advirtió. De todas maneras, aclaró que si hubiera sido aprobada la ley, no se podría haber aplicado a la exmandataria por que la condena tuvo lugar previamente.
Las diferencias con Macri
Tras el fracaso de la sesión en Diputados, el expresidente Mauricio Macri expresó su malestar a través de un comunicado en las redes sociales. “¿De verdad nos interesa que los corruptos condenados no puedan seguir ejerciendo cargos públicos o queremos simular y usar esa debilidad como un instrumento de presión en otras negociaciones?”, planteó el líder del PRO.
Fuentes del Gobierno buscaron bajarle el tono al conflicto y aseguraron que la relación con el PRO “está bien”. En este sentido, afirmaron que los dichos del expresidente coinciden “con su posición histórica” en estos asuntos.
Además, el líder del PRO expresó en el comunicado que la falta de quórum en el recinto de Diputados dejó “flotando preguntas inquietantes y profundas para el futuro de la Argentina”. Y agregó: ¿Queremos o no queremos un país sin corrupción? ¿A alguien le importa la corrupción o ya estamos resignados? Sé que a una parte de la política, incluso a una parte de la opinión pública, les puede parecer que hay cosas más urgentes. Yo estoy convencido de que con dirigentes corruptos no hay ningún futuro”.