La fiscal Betina Lacki amplió temporalmente la imputación a la banda del puntero, que responde a Sergio Massa, Julio “Chocolate” Rigau y sus jefes, Facundo Albini y Claudio Albini. Hasta el momento se les adjudicaba haber defraudado a la administración pública con una maniobra de «ñoquis» y prestanombres entre 2012 y 2023, ahora se amplió hasta 2002.
“En virtud de las constancias reunidas en autos, este Ministerio Público Fiscal realizó una ampliación respecto del alcance temporal”, informó Lacki a los procesados en esta causa.
Las pruebas
Primero se estimó una maniobra de unos tres años porque en un chat en el teléfono del puntero, fechado el 27 de agosto de 2023, el exconcejal Facundo Albini le dice: “Te llevas 200 por mes hace tres años, y cuando te necesito no estás”.
Además, según surge de un informe de la División de Lavado de Activos de la Policía Federal, se habían tenido en cuenta solo los contratos que empezaron en 2012. Se estimó así que el perjuicio económico a la provincia de Buenos Aires rondaría los $800 millones.
Sin embargo, las cosas empezaron en 2002 y el perjuicio económico ha sido abrumadoramente superior. Más de un tercio de los ñoquis (17 casos) del lote de tarjetas que se le secuestraron a Rigau fueron contratados antes de 2012. Solo ocho de los contratos son recientes (desde 2020). Y entre los de 2002 están, por ejemplo, la primera mujer de Claudio Albini.
Un cálculo periodístico realizado en el marco de esta investigación, teniendo en cuenta año por año del contrato de cada dueño de las 48 tarjetas y sus sueldos (son de septiembre de 2023, cuando arrancó la investigación) arroja una cifra de $4.000.000.000 (cuatro mil millones de pesos). Y esto es solo con el lote de 48 tarjetas que le encontraron ese día a Chocolate en el cajero.