A finales de 2024, China registró un preocupante aumento en los casos de infecciones respiratorias agudas, destacándose el HMPV (human metapneumovirus) como uno de los principales responsables. Este brote coincidió con el invierno, una época propicia para la propagación de enfermedades respiratorias, lo que generó alarma entre la población y las autoridades sanitarias.
El HMPV pertenece a la familia Pneumoviridae y guarda similitudes con el virus respiratorio sincicial (VRS). Su incubación dura entre tres y cinco días, y los casos positivos suelen presentar fiebre durante unos diez días. Este virus de ARN monocatenario negativo afecta principalmente el tracto respiratorio superior, causando síntomas como fiebre, tos, congestión nasal, dolor de garganta y, en casos graves, sibilancias y dificultad para respirar. Niños pequeños, adultos mayores y personas inmunocomprometidas son los más vulnerables, con riesgos de desarrollar neumonía o bronquiolitis.
Ante este brote, las autoridades chinas implementaron un sistema piloto de monitoreo para neumonías de origen desconocido, mejorando la detección y respuesta temprana a enfermedades emergentes. Sin embargo, el aumento de pacientes con síntomas respiratorios ejerció una gran presión sobre el sistema de salud, especialmente en las provincias del norte y entre menores de 14 años.
A pesar de la preocupación, expertos en salud han enfatizado que la mayoría de las personas infectadas se recupera sin mayores complicaciones. Además, advirtieron contra el uso indebido de medicamentos antivirales, ya que no existe un tratamiento específico ni vacuna para el HMPV. El manejo de la enfermedad se centra en aliviar los síntomas y proporcionar cuidados de apoyo.
Medidas preventivas contra el HMPV
- Lavado de manos frecuente: Usar agua y jabón durante al menos 20 segundos.
- Uso de desinfectantes: Aplicar soluciones a base de alcohol si no hay acceso a agua y jabón.
- Evitar el contacto cercano: Mantener distancia de personas enfermas y evitar lugares concurridos durante brotes.
- Cubrirse al toser o estornudar: Usar el codo o un pañuelo desechable para prevenir la propagación de gotas respiratorias.
- Limpieza de superficies: Desinfectar regularmente objetos y superficies de uso común.
Aunque el HMPV plantea desafíos, la adopción de estas medidas puede reducir significativamente el riesgo de infección y ayudar a controlar su propagación.
