El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, manifestó su emoción de que los rehenes de Hamas sean liberados en el marco del acuerdo alcanzado entre Israel y Hamas. Al respecto, destacó la «tenaz y meticulosa» diplomacia de Washington para llegar a ese entendimiento.
Tanto el saliente Biden como el presidente electo Donald Trump se atribuyeron el mérito de que Israel y Hamas aceptaran el acuerdo después de que la Casa Blanca incluyó al enviado de Trump para Medio Oriente en negociaciones que se han prolongado durante meses.
«Este acuerdo detendrá los combates en Gaza, proporcionará la tan necesaria ayuda humanitaria a los civiles palestinos y reunirá a los rehenes con sus familias tras más de 15 meses de cautiverio», expresó Biden.
Por su parte, Trump afirmó que él fue la fuerza impulsora detrás del acuerdo, cuyos detalles finales aún se estaban ultimando, según la oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
«Es el resultado no sólo de la extrema presión a la que se ha visto sometido Hamas y del cambio en la ecuación regional tras el alto el fuego en Líbano y el debilitamiento de Irán, sino también de la tenaz y minuciosa diplomacia estadounidense», afirmó el demócrata. «Mi diplomacia nunca cesó en sus esfuerzos por lograrlo», insistió.
La abierta aceptación por parte de la administración Biden de la participación del equipo entrante de Trump en las conversaciones se basó en mucho más que la influencia del presidente electo sobre Netanyahu y sus amenazas de que habría «un infierno que pagar» si no se llegaba a un acuerdo antes del día de la toma de posesión, dentro de cinco días, dijeron tres funcionarios estadounidenses actuales.