El Gobierno de la Ciudad anunciará este miércoles la compra de 40 vagones para las líneas A y C, y otros 174 para renovar completamente la B. Así, marcará el final del conflicto que mantuvieron durante años con el sindicato de los metrodelegados, que denunciaban la presencia de asbesto ( un material cancerígeno) en las formaciones.
La iniciativa será presentada por el jefe de gobierno, Jorge Macri, y es en el marco del nuevo Sistema Integrado de Movilidad Urbana, un plan que busca mejorar el transporte para las 6 millones de personas que circulan diariamente por el ámbito porteño.
Como principal política, el plan prevé la compra de 40 vagones para las líneas A y C, y 174 para renovar completamente la B. Sobre esta última línea había una fuerte polémica con los metrodelegados, que reclamaron durante años abandonar esas formaciones y comprar nuevas debido a la presencia de asbesto.
«Esto ya significa el final de ese tema», dijeron fuentes de la gestión de la Ciudad sobre el tema que los enfrentó durante años con el gremio AGTSyP, alineado con el kirchnerismo.
La gestión porteña destacó que el plan busca que «moverse sea una experiencia más cómoda, segura y rápida, con un servicio de transporte moderno, eficiente y previsible, y al mismo tiempo cuidar la sustentabilidad del ambiente; que conviva con un tránsito ordenado y una infraestructura de primer nivel».
En ese marco, el Ministerio de Infraestructura pasará a llamarse Ministerio de Movilidad e Infraestructura, porque va a tener este nuevo enfoque de gestionar cómo se mueve la gente en la Ciudad, aunque sin desatender lo que refiere a obras que no tengan que ver con el transporte, se anticipó.
El plan prevé además un rediseño de toda la circulación que integra, además del ordenamiento del tránsito, las 31 líneas de Colectivos de la Ciudad, las autopistas, la red de 311 kilómetros de ciclovías, que usan alrededor de 300 mil personas todos los días; los 17 mil taxis que componen la flota porteña; el Metrobús, el Premetro y el Subte.
Los ejes principales del Sistema Integrado de Movilidad Urbana son, en primer lugar, la renovación de la red de subtes y del Premetro.
Con ese objetivo, se comprarán 174 vagones de subte para la línea B y de otros 40 para las líneas A y C. Serán cinco formaciones de cinco coches cada una para el servicio que conecta las estaciones de Constitución y Retiro y otras tres formaciones para la línea más antigua del subte porteño, que une las terminales de Plaza de Mayo y San Pedrito en el barrio de Flores.
Todas las unidades serán cero kilómetro y con aire acondicionado. La ampliación de la flota vehicular en las líneas A y C beneficiará a alrededor de 265 mil usuarios diarios del servicio.
El monto de la compra es de 73 millones de dólares en el marco de la ampliación del contrato con la empresa CITIC. La operación se hará efectiva una vez que la Legislatura apruebe el permiso de endeudamiento para la adquisición.
Este año además se avanzará con la renovación total de la flota de coches de la línea B: serán 29 formaciones y 174 coches. Toda la renovación beneficiará a 470 mil pasajeros y demandará una inversión de 370 millones de dólares, se detalló. Para el caso de esta línea se abrió la licitación pero aún no se anunció al ganador de la misma. Los primeras formaciones llegarán en los primeros doce meses, dijeron fuentes del gobierno porteño.
En materia de sistemas de pagos, se destacó que la Ciudad «fue la primera en terminar con el monopolio de la tarjeta SUBE» y se seguirá reforzando el libre uso de diferentes medios como tarjetas bancarias o teléfonos celulares, una modalidad que ya suma más de dos millones de viajes.
También en los colectivos comenzarán a aplicarse sistemas multipagos. Esto se hará en el marco del plan en marcha a partir de que el Gobierno porteño asumió la gestión de las 31 líneas que circulan exclusivamente por la Ciudad y que, además, incluye la instalación y monitoreo de más de 6.500 cámaras de seguridad.
Por otro lado, la Ciudad lanzará este año nuevas propuestas de movilidad con un enfoque sustentable de transición energética, como el TramBUS y la primera línea de colectivos eléctricos, que son ideales para entornos urbanos ya que son silenciosos, sin vibraciones y sin emisiones.
La primera línea de colectivos totalmente eléctricos unirá Plaza San Martín con Parque Lezama, mientras se estudia la factibilidad de extender el recorrido hasta La Boca. Serán inicialmente 12 unidades en circulación desde mayo que están siendo fabricadas en China.
A su vez, continuará la remodelación integral de las autopistas porteñas para mejorar los 51 kilómetros de la traza que utilizan diariamente más de un millón de vehículos. En ese marco, se está trabajando en la readecuación integral de la Autopista Dellepiane para impulsar y mejorar la conectividad del sur de la Ciudad, se detalló sobre las obras de las colectoras sur y norte de esa autopista.
