El fatal accidente entre un avión de American Airlines y un helicóptero militar que dejó 68 muertos, dejó una historia en paralelo que conmocionó a millones de usuarios en redes sociales. Fue el relato del patinador Jon Maravilla, quien no subió al vuelo comercial debido a un problema con su perro.
El joven no pudo abordar debido al tamaño de su mascota, que fue considerado demasiado grande para pasar por la puerta de embarque: «No me permitieron abordar. Sáquenme de Kansas, por favor«, publicó en su cuenta de Instagram, sin imaginar que aquella frustración acabaría salvándole la vida.
Tras ser rechazado en el aeropuerto, el deportista decidió hacer el trayecto por tierra, un viaje de 14 horas. Al enterarse del accidente, comprendió la magnitud del peligro del que había escapado. «Era nuestro vuelo de regreso. No entendía por qué de repente ya no era posible traer a mi perro. No podía dejarlo atrás, así que decidimos conducir por la ruta«, confesó a la agencia Ria Novosti.
El vuelo 5342 llevaba a bordo a varios patinadores, entrenadores y familiares que regresaban del Campamento Nacional de Desarrollo y el Campeonato de Patinaje Artístico de Estados Unidos, celebrado en Wichita. Entre los fallecidos se encontraban destacados atletas, como la pareja rusa Yevgenia Shishkova y Vadim Naumov, campeones mundiales en 1994.
Conmovido, Maravilla evitó mencionar nombres de sus compañeros fallecidos: «No quiero dar nombres. Es una tragedia lo que ha pasado«, expresó con tristeza.
El deportista, nacido en Michigan, compite en la modalidad artística de parejas junto a Saya Carpenter, representando al equipo de patinaje sobre hielo de Estados Unidos.