La Corte Suprema de Justicia rechazó el pedido de licencia del juez Ariel Lijo en su cargo en Comodoro Py, por lo que el magistrado ahora deberá renunciar a su puesto en un tribunal federal para asumir como ministro del máximo tribunal.
Los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkratz, Ricardo Lorenzetti y Manuel García-Mansilla -designado recientemente por un cuestionado decreto del presidente Javier Milei- decidieron no otorgarle la licencia extraordinaria a Lijo para poder asumir en la Corte sin tener que dejar su cargo en Comodoro Py.
Sólo Ricardo Lorenzetti votó a favor de aprobar la licencia extraordinaria que pedía el juez, quien está al frente del del juzgado federal número 4 y subroga el 12, que está vacante.
Lijo, designado por decreto en el alto tribunal por Milei junto a García-Mansilla, se enfrenta a la decisión de tener que renunciar a su cargo de juez federal si quiere asumir. El obstáculo es que el puesto en la Corte solo estaría firme hasta fin de año y su pliego todavía puede ser rechazado por el Senado.
En caso de que el magistrado decida permanecer en su cargo en Comodoro Py, el Gobierno debería enviar al Congreso un nuevo pliego con otro candidato para completar la Corte Suprema.
El Senado ante la designación de los jueces de la Corte Suprema
La oposición en el Senado se prepara para avanzar con el rechazo de los pliegos de los jueces nombrados por decreto. Desde Unión por la Patria planean firmar en disidencia el dictamen de la comisión de Acuerdos con el pliego de García Mansilla, para dejar habilitado su tratamiento en una sesión especial
Para rechazar los pliegos se necesita que 25 senadores voten en contra, ya que la Constitución Nacional establece que para aprobarlos se requieren los dos tercios de los votos de los senadores presentes, es decir 48 a favor (si hay asistencia perfecta). Primero tienen que conseguir que los dos dictámenes lleguen al recinto y luego, que 37 senadores y senadoras estén sentados en sus bancas para dar quórum y permitir el inicio de la sesión. Finalmente, se produce la votación de los pliegos, cada uno por separado.