Esta mañana se actualizó el estado de salud de Pablo Grillo, el fotógrafo que fue víctima de un ataque por parte de la policía durante la marcha de jubilados del miércoles. Grillo sufrió un disparo directo de un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza y, como consecuencia, enfrenta una grave fractura de cráneo que tiene en alerta tanto a los médicos como a sus familiares.
Fabián Grillo, padre de Pablo, informó que su hijo mostró "una leve mejoría dentro de la gravedad del cuadro existente". A pesar de esto, el pronóstico sigue siendo “grave y reservado”. En el cuarto piso del Hospital Ramos Mejía, Grillo continúa luchando por su vida, con expectativa gracias a una ligera mejora ocurrida cuando le retiraron la sedación para realizarle los chequeos necesarios.
Desde el punto de vista médico, este ligero avance se atribuye a la reconstrucción de parte del tejido afectado. Pablo tuvo una fractura de cráneo con pérdida de masa encefálica y disminuyó la presión intracraneal tras el impacto del proyectil.
"Los brazos y las piernas reaccionaron algo. Por lo que dice la doctora, eso es positivo, pero hay que seguir siendo cautosevolución de su hijo. Además de preocuparse por la salud de Pablo, el padre mencionó que la familia ya cuenta con los videos que evidencian cómo la policía disparó el proyectil de forma horizontal hacia la cabeza de su hijo.
En tanto, Grillo padre sostuvo que ni Milei ni sus funcionarios se acercaron a la familia, pero inmediatamente aclaró que pasó Quirós por el Ramos Mejía. “Vino Quirós, estuvo un ratito, habló con Pablo, conmigo no, yo estaba en otro lugar del hospital, bien, se puso a disposición”, sostuvo sobre el ministro de Salud porteño, que ayer por la tarde contó en su cuenta de X que había visitado a todos los heridos en la movilización.