La justicia cordobesa dictó prisión perpetua para Néstor Aguilar Soto, quien fue hallado culpable del femicidio de Catalina Gutiérrez. La sentencia fue emitida por la Cámara en lo Criminal y Correccional de 11° Nominación de Córdoba, luego del veredicto de un jurado popular.
El tribunal, compuesto por los jueces Susana Frascaroli, Horacio Carranza y María Gabriela Rojas Moresi, encontró a Soto responsable del delito de homicidio calificado por mediar violencia de género y criminis causa, lo que significa que el crimen fue cometido para ocultar otro delito.
Durante el juicio, el fiscal Marcelo Sicardi sostuvo que se trató de un femicidio enmarcado en un contexto de violencia de género. "Soto ejercía una tremenda violencia psicológica con todas sus amistades cercanas mujeres", se detalló.
El jurado popular dictaminó la culpabilidad de Soto con una votación de ocho a favor y dos en contra por el agravante de femicidio, y siete a favor y tres en contra por criminis causa. El abogado querellante, Carlos Hairabedian, había solicitado que se incluyera el agravante de alevosía, pero este pedido no prosperó.
En contraposición, la defensa encabezada por la abogada Ángela Burgos Niño insistió en que el hecho debía ser considerado un homicidio simple, argumentando que no hubo violencia de género.
En ese sentido, la letrada calificó de "descabellado" el agravante de violencia de género y consideró "flojo" el juicio por jurados. "A Néstor lo voy a defender hasta el final. Este chico no va a tener perpetua y tampoco estará 25 años en la cárcel", afirmó.
En su alegato, Burgos Niño intentó argumentar que Soto no tenía intenciones premeditadas de asesinar a Catalina. "Él no es un criminal, no planeó matar a Catalina. Todos somos susceptibles y posibles de ser homicidas, estafadores", señaló.
Durante la lectura de la sentencia, el condenado permaneció impasible, con una mano en su rostro y el otro brazo sobre el escritorio. Mientras tanto, los familiares de Catalina se abrazaron conmovidos y los presentes en la sala aplaudieron y gritaron: "¡Catalina presente, ahora y siempre!".
El crimen de Catalina Gutiérrez
El 17 de julio de 2024, Catalina Gutiérrez pasó a buscar a Soto por su casa para asistir juntos a una reunión con amigos. Sin embargo, tras una discusión entre Soto la golpeó, la estranguló y posteriormente la mató.
Luego del femicidio, trasladó el cuerpo de la joven hasta su Renault Clio y condujo hasta el barrio Ampliación Kennedy, donde prendió fuego el cadáver antes de abandonarlo.
En un primer momento, Soto negó su responsabilidad ante los familiares de Catalina, pero finalmente confesó el crimen. Durante el juicio, declaró que "es un homicida, pero no un femicida" y pidió "perdón de todo corazón a los padres" de la víctima.
Sin embargo, el padre de Catalina, Marcelo Gutiérrez, sostuvo en diálogo con Agencia Noticias Argentinas, que rechazó cualquier tipo de disculpa. "Jamás en la vida aceptaré sus disculpas. Es un invento. Fue muy feo escucharlo, sentí asco, impotencia y bronca. Hablaba más de él, de lo que lo acusan, que del hecho en sí. Es un psicópata con todas las letras".