El ex senador Edgardo Kueider se encuentra en el centro de una nueva indagación judicial en Paraguay por la presunta comisión de lavado de dinero, lo que agrava aún más sus problemas legales. La investigación se centra en un intento fallido de adquisición de seis departamentos, una acción que comenzó mucho antes de su detención mediática en la frontera con Brasil.
Según confirmaciones de la Unidad de Información Financiera (UIF) de Paraguay, se identificaron transacciones sospechosas relacionadas con Kueider y su pareja, Iara Guinsel Costa. Los registros indican que, en abril de 2024, Guinsel Costa realizó un primer pago de 120 mil dólares, seguido de otro de 250 mil en junio.
Estas operaciones continuaron con pagos parciales en efectivo, dirigidos a la compra de propiedades de las compañías Innova Asunción S.A. y Exclusiva Py EAS, que tienen como representantes a los empresarios Andrés Torales Benega y Fernando Cousirat.
Es interesante notar que estos mismos empresarios son ahora los propietarios de Golsur, la empresa que Kueider y Guinsel Costa utilizaron para justificar los fondos en efectivo que llevaban en su vehículo al momento de ser demorados.
La transacción para adquirir esta compañía se concretó el 30 de julio del año pasado, exactamente el mismo día en que buscaban formalizar la compra de los departamentos. Sin embargo, en octubre firmaron un poder amplio a favor de Guinsel Costa, justo antes de que la operación inmobiliaria se cayera en septiembre.
La UIF paraguaya destacó diversas incongruencias en la documentación bancaria de Innova Asunción S.A., revelando discrepancias entre las fechas de los depósitos y los contratos firmados con Guinsel Costa.
Esta información fue harílada al organismo antilavado local, generando así un escándalo que atrajo la atención del Grupo Egmont. No es la primera vez que Kueider enfrenta acusaciones relacionadas con transacciones dudosas en Paraguay.
En diciembre, el empresario Carlos Guasti presentó una denuncia, indicando que Kueider y su pareja intentaron adquirirle cinco departamentos, pero la operación no prosperó por la falta de una sociedad legalmente constituida.
Guasti declaró que Kueider y Guinsel Costa entregaron mil dólares por cada unidad, sin lograr materializar el acuerdo. Además, aportó mensajes de WhatsApp en los que Kueider, utilizando un número estadounidense, reconocía las demoras en el proceso.
En la actualidad, Kueider se encuentra cumpliendo prisión domiciliaria en Asunción luego de haber sido arrestado en diciembre con más de 200 mil dólares no declarados, en un caso que se tramita en Ciudad del Este, bajo la acusación de contrabando.
Mientras tanto, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado ha solicitado su extradición, así como la de Guinsel Costa; sin embargo, Paraguay aún no ha procedido con esta solicitud. En enero, la fiscal adjunta Matilde Moreno pidió información adicional sobre las causas que enfrenta Kueider en Argentina, donde es investigado por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
La complicación de Kueider se acentúa también en el ámbito argentino. En el juzgado de Arroyo Salgado, la indagación por lavado de dinero ha tomado impulso, resultando en la detención de siete personas vinculadas a él, entre las cuales se encuentra su socio Daniel González, conocido como 'Pajarito', además de prestanombres, contadores y una abogada.
La jueza ha señalado un complejo entramado de maniobras fraudulentas que abarca desde la compra de departamentos con empresas fantasma hasta préstamos simulados y evasión fiscal. Con cada nueva evidencia, la red de corrupción en torno a Edgardo Kueider se manifiesta con mayor claridad, mientras su panorama judicial se torna cada vez más incierto.