Detrás de los cuestionamientos radicales por los tarifazos y del futuro del presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, del lado de Carrió, hay otra agenda con olor electoral. El caso Farmacity y el reclamos de los herederos de Venegas.

Los tarifazos, la embestida de Elisa Carrió contra el titular la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y el supuesto lobby del vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, en la intentona de la cadena que supo fundar años atrás, Farmacity, por ingresar a la provincia de Buenos Aires son emergentes de las tensiones que agitan a Cambiemos por estos días. Constituyen, de algún modo, el preanuncio de las discusiones electorales dentro de la alianza entre el PRO, la Coalición Cívica y la UCR que prometen chisporroteos en la definición de candidaturas rumbo a 2019 donde hoy talla el discurso de dar PASO en las provincias en las que están autorizadas para dirimir las postulaciones y sino ir hacia “listas de consenso” en cada distrito.

Fue el radicalismo quien intentó alertar hacia dentro sobre la hegemonía macrista en la toma de decisiones. Atento al desbalance de poder dentro de la alianza de gobierno, eligió un tema que preocupa casualmente al propio electorado del oficialismo: la suba en las facturas en los servicios de luz, agua y gas.

Primero surgieron reclamos en busca de mayor participación en la coalición de Gobierno y el pedido -del mismísimo Alfredo Cornejo, gobernador mendocino y presidente del partido- de que uno de ellos acompañe a Macri en la fórmula presidencial el año próximo.

Empero, en las últimas semanas ganaron espacio las quejas por los tarifazos. Cornejo directamente dijo que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, “le hizo meter la pata” varias veces al Gobierno con este tema.

Pero las voces disonantes continúan dentro del oficialismo y, al parecer, el presidente Mauricio Macri les exigió a los portadores de la “boina blanca” que en lugar de quejarse propongan una solución alternativa. “Los aumentos le pegan de lleno a nuestro electorado. Desde el comienzo (del Gobierno) no han cesado y la clase media lo está sintiendo, como que se ha acostumbrado a los tarifazos”, contó una fuente de la UCR que dijo que legisladores y dirigentes de la fuerza trabajan en una “propuesta” para presentarla a la Casa Rosada. Las opciones que barajan los radicales son pagos en cuotas o un mecanismo para aplanar las tarifas para evitar los picos de consumo estacional.

En privado, el jefe de Estado le resta importancia a los cuestionamientos radicales. “Escucho a todos pero el que decide soy yo”, enfatiza ante su mesa chica. Y, desde hace 2 años, banca al ministro Aranguren sin dudarlo.

Otra de las fundadoras de Cambiemos, Lilita Carrió, también alertó sobre el tema. Y, de hecho, en las próximas horas presentará en Diputados un proyecto de resolución en el que pedirá informes al jefe de Gabinete respecto del método de ajuste de las tarifas de los servicios públicos. En criollo, la líder de la CC también se suma a las críticas de los socios radicales y de la oposición, que se suman a sus pataleos por la falta de apoyo de la Casa Rosada en su pedido de juicio político contra Lorenzetti (esta semana hubo foto de Marcos Peña y el ministro Germán Garavano con el titular del máximo tribunal en el Palacio de Justicia).

Y esta semana la CC de la Provincia formalizó su rechazo a que Farmacity ingrese a Buenos Aires: se trata de una batalla de la cadena con los farmacéuticos bonaerenses que ha venido perdiendo en todas las instancias judiciales provinciales pero que ahora está a la espera de un fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. En el medio, están las denuncias de los profesionales de la salud y de la oposición del lobby del vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, que aún conserva un pequeño porcentaje accionario de la firma que, anunció, vendería antes de fin de año.

“Reiteramos nuestra posición histórica que es potestad de la Provincia resolver sobre el tema de acuerdo a sus leyes y aquí la Justicia dijo la empresa no es acorde a la ley (provincial). Ahora se espera fallo de la Corte luego del dictamen favorable del Procurador” interino, contó una importante dirigente de la CC consultada. Para colmo, el primer funcionario de Cambiemos procesado vino relacionado a este tema: fue Raúl Alejandro Ramos, ex secretario de Políticas en el Ministerio de Salud, acusado de cajonear multas contra Farmacity.

La fuente no ocultó la preocupación de la fuerza por el malhumor social por las subas tarifarias. “Nos preocupa, por eso queremos saber cómo las empresas, que han empezado a tener ganancias, conforman sus cuadros tarifarios y son controladas. Por eso le pedimos explicaciones a Peña”, remarcó la también legisladora. En este sentido, admitió que esta problemática impacta de lleno en el electorado de Cambiemos. “Lo que nos preocupa se lo hacemos oír al Ejecutivo”, contestó al ser consultada sobre las tensiones existentes con la Casa Rosada.

Ni demagogia ni intransigencia :
En materia de tarifas hay que encontrar una tercera salida, que no sea la posición inflexible del gobierno ni la demagogia de sectores del PJ que han vaciado la Nación durante el Kirchnerismo.

— Elisa Lilita Carrió (@elisacarrio) April 18, 2018

El sainete en el Congreso, cuando la oposición quiso ponerle un freno a los tarifazos, sin embargo, encontró a la alianza oficialista unida, a pesar de quedar al borde de que el arco opositor lograra su cometido, a un diputado para el quórum, con una polémica retirada de Alfredo Olmedo.

Ninguno de los socios de la coalición de gobierno admite, con todo, que los chispazos se deben a recelos por la configuración del mapa electoral con vistas a los comicios del 2019. Se empezó a mover institucionalmente la mesa política de Cambiemos: hace 10 días hubo un almuerzo en Casa Rosada convocado por Peña, en el que se coincidió en buscar listas de consenso en los 24 distritos. Empero, las tensiones persisten: los radicales, por caso, no quisieron opinar a la salida de aquella reunión. Mañana jueves, Peña recibirá a los jefes de bancadas legislativas del oficialimso.

“Falta aún para las elecciones. Pero haríamos primarias en aquellas provincias en las que haya ley provincial”, contó una calificada fuente gubernamental. Las provincias que cuentan con PASO obligatorias son Buenos Aires, Capital Federal, Catamarca, Chaco, Chubut, Entre Ríos, Mendoza, Salta, San Juan y Santa Fe.

Así, no habrá primarias en Córdoba donde se anticipa una filosa puja dentro del oficialismo: el macrismo propone al triunfador de las legislativas, el ex árbitro Héctor Baldassi, y, con mayor énfasis (“tiene gestión y eso le gusta a Macri”) al flamante funcionario de Interior (en el Incap), Luis Juez, mientras que los radicales postulan al diputado Mario Negri y a “Ramoncito” Mestre, actual jefe comunal de La Docta.

Se trata, en última instancia, de tensiones subterráneas que empiezan a mover los cimientos del oficialismo. Los socios menores, con todo, buscan sentar posición -como gesto de autoridad- con temas escabrosos para la Casa Rosada.

Pero hay un espacio dentro de Cambiemos que ha perdido terreno en el último año. Aunque nominalmente también participa de la interna, el partido FE, que fundó el fallecido Gerónimo “Momo” Venegas, ha perdido fuerza desde la muerte del sindicalista. Su reemplazante al frente partido y de la UATRE, Ramón Ayala, asegura que seguirán participando de las discusiones y que la continuidad en Cambiemos les permitió “meter” un intendente (Cecilio Salazar, de San Pedro) y un diputado nacional (Pablo Ansaloni).