El Gobierno nacional tiene dos enemigos declarados: el campo y Clarín. Pues bien, esta semana esos dos adversarios estarán juntos en la megamuestra Expoagro, muy cerquita de Ramallo. Y como si eso fuera poco, Daniel Scioli oficiará de maestro de ceremonias el miércoles, cuando de por inaugurada esa gran reunión de productores rurales que tan poca empatía tienen con Cristina Kirchner. Y el gobernador de Buenos Aires saldrá en primera plana de La Nación y Clarín como suele suceder en cada edición. CFK aún no dio muestras de su estrategia para volcar la atención hacia la Casa Rosada, pero den por sentado que no quiere verlo a Daniel tan suelto de cuerpo codo a codo con sus adversarios.

Por su parte, el gobernador sigue metiéndole fichas a su candidatura permanente, esa especie de estado que transita desde el mismo momento en que aceptó la vicepresidencia de la mano de Néstor Kirchner hace ya diez años. En ese sentido ya se reunió con el gobernador de Chubut, Martín Buzzi, al igual que lo había hecho con José Luis Gioja (San Juan), Francisco Pérez (Mendoza), Maurice Closs (Misiones) y Juan Manuel Urtubey (Salta). «Yo he explicado cuál es mi voluntad de cara al futuro, la gente lo ha entendido, y no tengo más nada que explicar», señaló durante la firma de un convenio turístico con su par chubutense. Allí desembarcó además el grupo Bapro, con una sucursal, al igual que en Córdoba, cuyo gobernador (el peronista opositor José Manuel de la Sota) mantiene un excelente vínculo con DOS. Es así que los acuerdos turísticos y comerciales sirven de marco para esa construcción que el ex motonauta realiza sin prisa pero sin pausa. Este fin de semana el tour pasó por la Fiesta de la Vendima en Mendoza. Particularmente curioso fue lo que sucedió en la cena de la Vendima Solidaria, organizada por los empresarios Daniel Vila y José Luis Manzano, a la que asistieron Scioli y Sergio Massa, por separado. Se sentaron en mesas alejadas, y no se cruzaron palabra en toda la velada. Con Scioli estuvo Vila de anfitrión, y con Massa, Manzano. Eso sí, el único punto de acuerdo fue en la negativa a la reforma del Código Penal. Massa, explícitamente, y Scioli despegándose del proyecto oficial.

Dejemos la tierra del vino y viajemos a la Ciudad de Buenos Aires, que no queda por fuera de ese armado. Allí el vínculo más fuerte de Scioli es con el líder de los porteros, Víctor Santa María, que hace tiempo juega a dos puntas con CFK y DOS y que seguramente quedará al frente de PJ porteño, siempre y cuando el joven camporista Mariano Recalde, titular de Aerolíneas Argentinas, no le arruine la fiesta. Por sus oficinas del SUTERH, sin embargo, se llevaron un susto cuando la revista La Tecla dejó correr el rumor de una posible alianza entre Mauricio Macri y Scioli de cara al 2015. Vale la pena detenerse en esto: MM no da un paso sin una encuesta en la mano, y su proyección para la Presidencia apenas roza los 11 puntos. Casi resignado a no poder pegar el gran salto (o cruzar la Plaza de Mayo, como lo hacía Fernando de la Rúa en aquel spot publicitario), no pega un ojo pensando alianzas. Su buena relación personal con Scioli (cimentada en la amistad de Karina Rabolini y Juliana Awada) lo deja en una inmejorable posición para las conversaciones, más allá de la pelea mediática que las espadas sciolistas mantienen con el PRO. Y en ese contexto, habrían tanteado la posibilidad de que el actual funcionario porteño Diego Santilli sea el eslabón perdido entre ambas fuerzas. Vale la pena pensarlo.

Pero para no desviar nuestra mirada del campo, volvamos a Ramallo, donde la recorrida de Scioli del miércoles por la muestra centrará la atención de todos los medios enfrentados al kirchnerismo y también de los oficialistas. Será una cobertura digna de atender. ¿Resistirá estoica Cristina esa provocación, o contraatacará con algún anuncio de peso? Nosotros nos inclinamos por la segunda opción, visto que el anteproyecto de reforma del Código Penal no levanta vuelo y que Massa (incluso por la negativa) sigue golpeando con efectividad (y mucha desfachatez) donde más le duele a CFK: las encuestas.