La Procuración General de la Nación creó la UFEM, la primera Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres. Hablamos con Mariela Labozzeta, la fiscal que será la coordinadora titular de la Unidad.
Por Leila Sucari (@leilasucari)
Fuimos miles las que salimos a la calle bajo el lema Ni Una Menos. Con carteles pintados a mano, hijos a upa, amigas, novios y, sobre todo, ganas de decir basta. Después de una ola de femicidios y de que -por fin- se empezara a hablar de violencia de género, la campaña Ni Una Menos surgió como un reclamo desesperado frente a la cantidad de mujeres asesinadas, maltratadas y golpeadas en nuestro país. El objetivo, además de hacernos visibles y sacar el tema a la luz, fue -y es- generar presión para que desde el Estado se pusieran en marcha todos los mecanismos necesarios para prevenir la violencia y asistir a las víctimas.
Si bien falta muchísimo, y es una lucha que recién comienza, la buena noticia es que esta semana entró en vigencia la nueva Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal y se creó la UFEM, una unidad fiscal que viene a dar respuesta a la demanda social que surgió bajo el lema Ni Una Menos. ¿Para qué sirve? “La idea es generar una estructura que de respuesta a la problemática de violencia de género”, explica Labozzeta. “La Unidad Fiscal es la continuidad del programa de Políticas de Género que funciona desde 2012 y trabaja haciendo capacitaciones, formando profesionales y dándole visibilidad a los casos. Concretamente la UFEM se creó para intervenir activamente en los casos de violencia contra la mujer. Hoy estamos trabajando con una comisión de especialistas para pensar cuál va a ser el plan de acción y la dinámica de trabajo, ya que es la primera vez que se hace en nuestro país”.
Desde hace años -frente a la falta de políticas públicas- son las ONG’S las principales encargadas de brindar apoyo, contención y de proporcionar datos y estadísticas sobre femicidios y mujeres maltratadas. Ahora la misión es que la Unidad Fiscal trabaje de manera integrada con las organizaciones sociales, ONG’S, organizaciones de víctimas, organismos públicos y académicos. “Queremos armar un plan en base al trabajo previo de todos. Ver qué se necesita, cuáles son los principales reclamos y dónde están las falencias”, dice la fiscal.
Se espera que la UFEM asegure el acceso efectivo y respetuoso de la mujer a los mecanismos judiciales. Para eso habrá equipos especializados en género que puedan responder conociendo la problemática en profundidad, para que no se repitan nunca más casos donde la respuesta sea “volvé a tu casa y no hagas quilombo” o “no seas escandalosa”, y para que tampoco se descrea de la víctima y se la obligue a pasar por cuestionarios eternos y humillantes. Otro de los objetivos es -según la disposición creadora de la Unidad- : “seleccionar y desplegar las estrategias de investigación sobre los fenómenos criminales atravesados por las diferentes clases de violencia contra las mujeres y trabajar sobre los modos en que sus distintas manifestaciones afectan a otros grupos en situación de vulnerabilidad por razón de su orientación sexual e identidad de género”.
Para que la Unidad Fiscal tenga buenos resultados, el desafío será descentralizar: la ciudad de Buenos Aires estará dividida en siete distritos fiscales. “Los organismos centralizados no funcionan, la idea es capacitar gente y trabajar en conjunto”, dice Labozzeta. “Nosotros tenemos incidencia sólo en la Ciudad pero tenemos proyectado articular con las provincias, hacer un mapa de delitos y trabajar en conjunto porque tenemos claro que la violencia de género es un problema nacional”.
El camino recién comienza., cargamos con años de opresión y desigualdad de género. Reiventarnos como sociedad es un trabajo arduo que requiere paciencia, fuerza y voluntad por parte de hombres y mujeres. No será fácil, pero vamos bien. Hay que seguir hablando, compartir experiencias, cuestionar lugares comunes, pensar, debatir y -además de cambiar desde nuestras acciones cotidianas- exigirle al Estado que actúe a la par. La creación de la UFEM es un granito de arena que supimos conseguir.
