La marcha por los derechos de los jubilados, que tuvo lugar el miércoles a la tarde en la zona del Congreso, terminó con un saldo alarmante de cientos de detenidos y múltiples heridos, entre ellos el fotoperiodista Pablo Grillo. Grillo sufrió una grave lesión en la cabeza tras recibir el impacto de una cápsula de gas lacrimógeno y fue trasladado al Hospital Ramos Mejía, donde se le realizó una operación de emergencia debido a un traumatismo de cráneo y pérdida de masa encefálica.
La polémica
En el contexto de la cobertura del evento en el canal C5N, la periodista Mariana Brey expresó su opinión sobre la situación, lo que generó una tensa discusión en el estudio. "Hablamos de policías que han lastimado gente, claramente. Hablemos de policías que también han sido lastimados", fue parte de su intervención inicial. Además, describió el incidente como "un intento de golpe de Estado" y planteó dudas sobre la responsabilidad del ataque a Grillo: "¿Sabemos que el disparo vino de la policía? ¿Eso está confirmadísimo?".
Las declaraciones de Brey no pasaron desapercibidas para su colega Jorge Rial, quien reaccionó enérgicamente en su programa de radio. Reconociendo la labor de los periodistas y camarógrafos de C5N, Rial se expresó en términos claros: "Impecable todo el trabajo… Fue un día intenso, de gran profesionalidad, de empatía, de riesgo físico".
Con tono crítico, Rial no escatimó al criticar las opiniones de Brey y otros. "Hay hijos de puta en todos lados… Han degradado este laburo. Son voceros de un régimen, sépanlo", aseveró, dejando en claro su descontento. También arremetió contra quienes cuestionan la responsabilidad policial en el incidente que afectó a Grillo, señalando: "Cuando hacés eso pasás a la condición de hijo de puta. Me da vergüenza, y me da temor".
Por último, Rial lanzó una provocativa reflexión: "Discúlpenme si esto trae quilombo, pero ya estoy grande… Mariana Brey estaba gritando si estábamos seguros que a Grillo lo baleó un policía". Su fuerte reacción pone de manifiesto la tensión existente entre los comunicadores, especialmente en situaciones críticas como la vivida en la marcha.
