El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires presentó el plan de incrementos escalonados en las tarifas del Subte, con un alza progresiva que llegará a los $574 en abril.
El transporte público en la capital argentina sufrirá una nueva serie de ajustes tarifarios, según anunció la empresa estatal Subterráneos de Buenos Aires S. E. (SBASE). La convocatoria a audiencia pública para discutir estos cambios reveló un plan de incrementos que elevarán el costo del boleto del Subte y Premetro en los próximos meses.
Según la propuesta inicial del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA), el precio del boleto del Subte se situará en $574 a partir de abril, alcanzando los $667 en mayo y $757 en junio. Aquellos usuarios que no hayan registrado su tarjeta SUBE pagarán una tarifa aún más alta, llegando a $859 en abril.
En el caso del Premetro, se espera que las tarifas suban a $200,90 en abril, $233,45 en mayo y $264,95 en junio. Esto implica que aquellos pasajeros que no cuenten con la tarjeta SUBE nominalizada tendrán que abonar $300,57 en abril.
El GCBA aseguró que continuarán aplicando descuentos para usuarios de Red SUBE, así como para jubilados, pensionados, discapacitados y estudiantes. La medida busca, según comunicado oficial, mantener la proporción tarifaria entre los distintos medios de transporte, en línea con los ajustes recientes implementados a nivel nacional para colectivos y trenes, que se ajustan cada dos meses de acuerdo con la inflación.
Con estos nuevos incrementos, las tarifas del Subte reflejarán los siguientes valores a partir de abril, con descuentos del 20%, 30% y 40% de Red SUBE, según la cantidad de viajes mensuales realizados:
- 1 a 20 viajes: $574,00 ($859,07 sin Tarjeta SUBE registrada)
- 21 al 30 viajes: $459,20 ($687,25 sin Tarjeta SUBE registrada)
- 31 al 40 viajes: $401,80 ($601,35 sin Tarjeta SUBE registrada)
- 41 en adelante viajes: $344,40 ($515,44 sin Tarjeta SUBE registrada)
Este plan de incrementos generó preocupación entre los usuarios, quienes ven con preocupación el constante aumento en el costo del transporte público en la ciudad.
Los aumentos en las tarifas del Subte, junto con los incrementos en otros servicios básicos, plantean un desafío económico para los ciudadanos, especialmente aquellos de bajos ingresos. Muchos expresaron su frustración y temor ante la posibilidad que estos ajustes afecten aún más su capacidad para acceder al transporte público, un elemento fundamental para la movilidad en una ciudad tan grande como Buenos Aires.