Este viernes fue detenido en Mar del Plata un hombre de 66 años acusado de haber amenazado de muerte a través de las redes sociales a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. “Te vamos a matar. El sicario de La Matanza”, fue uno de los mensajes intimidantes que recibió y que encendió las alarmas de los encargados de velar por su bienestar.

Según fuentes policiales, tras una larga investigación sobre plataformas y aplicaciones de uso habitual, lograron dar con el sexagenario que residía en la ciudad costera. Fue la Superintendencia de Investigaciones Federales la que estuvo a cargo del relevamiento de datos, seguimiento y ubicación del acusado de amenazar a través de las redes a la ministra.

El proceso de detención del sospechoso estuvo a cargo de los agentes de la División Delitos Tecnológicos de la Policía Federal, quienes además secuestraron el celular del implicado y derivaron todo lo encontrado al Juzgado Federal 3 de Mar del Plata a cargo del juez Santiago Inchausti quien había ordenado el allanamiento del domicilio.

Mientras el celular es sometido a diferentes pericias, su propietario y acusado por el delito de amenazas, fue derivado a una dependencia de la División Unidad Operativa Federal de Mar del Plata y quedará allí a disposición del magistrado que lleva adelante la causa.

Estas amenazas a la ministra de Seguridad, se suman al joven que esta semana intentó entrar a la Casa Rosada con un machete. El mismo fue detenido por la Policía Federal y en el momento declaró que quería cometer un atentado: “Soy Dios y voy a matar al Presidente”.

Los efectivos de la Policía Federal interceptaron al hombre y lograron evitar su ingreso. Al llevarlo de nuevo a la calle, el hombre sacó de su ropa un machete y dijo que iba a cometer un atentado, ante la mirada asombrada y atemorizada de la gente que pasaba por el lugar. “Soy Dios y voy a matar al presidente”, gritaba mientras lo reducían.

Mientras los dos acusados se encuentran detenidos en sus respectivas jurisdicciones, ambos casos ya recorren los caminos necesarios en la Justicia a la espera de una resolución. Por su parte, las divisiones encargadas de desbaratar este tipo de operaciones continúan con las investigaciones complementarias.