El fiscal Marcelo Sicardi solicitó este miércoles la prisión perpetua para Néstor Soto, quien es considerado el principal implicado en el femicidio de Catalina Gutiérrez, un caso que conmocionó a la sociedad cordobesa y que se encuentra en pleno juicio en los Tribunales II.

Durante su declaración, Sicardi aseguró: “Estamos ante un femicidio” y subrayó que “hay una sola víctima, no dos, y esa víctima es Catalina Gutiérrez”. Además, comentó que el acusado se mostró evasivo, afirmando que “ayer se cansó de mentir, llevando a cabo manotazos de ahogado.

Es un lobo con piel de cordero”. El abogado querellante, Carlos Hairabedian, propuso incluir en la acusación el agravante de alevosía, que refiere a un acto perpetrado de manera traicionera, privando a la víctima de una defensa.

Esta postura fue cuestionada por la defensa, encabezada por Ángela Burgos Niño, quien debió ser informada por la Cámara sobre la validez de dicha calificación. Durante los alegatos, Sicardi planteó la necesidad de imponer la pena de prisión perpetua a Néstor Aguilar Soto, de 22 años, por el homicidio criminis causae de la joven de 21 años.

En un momento emotivo, Eleonora Vollenweider, madre de la víctima, se dirigió directamente al imputado, quien debía mirarla a los ojos ya que sería, según sus palabras, “la última vez” que lo vería. La angustia de Eleonora fue palpable cuando expresó: “Yo llego a mi casa y ella no está, falta en la mesa, en su cama, en su lugar en el auto”.

Además, compartió su tristeza por no poder darle el amor que aún siente. En contraste, la declaración de Soto, realizada el día anterior, giró en torno a sus propios sufrimientos y su experiencia en prisión, sin mostrar compasión por lo sucedido a Catalina.

El crimen ocurrió el 24 de julio del año pasado en la vivienda del acusado, quien narró con frialdad el asesinato y lamentó ser percibido como un narcisista, aunque continuó presentándose a sí mismo como una víctima.

Esta conducta inapropiada fue evidente cuando, con total desdén hacia la memoria de Catalina y su familia, reveló detalles íntimos de su vida sin necesidad. Finalmente, la declaración de Aguilar Soto dejó una impronta negativa en el jurado popular, que ahora deberá deliberar sobre su destino.