El Ejecutivo nacional llegó a un acuerdo con los armadores fluviales del Paraguay por el cobro del peaje en un tramo de la hidrovía, decisión que fue implementada durante el gobierno de Alberto Fernández y que había generado una tensión que escaló al punto de generar un conflicto diplomático entre ambos países.
El entendimiento se dio ayer en un Acta de Acuerdo firmada por la Administración General de Puertos (AGP) -como concesionario del tramo argentino- y la Cámara de Armadores Fluviales y Marítimos (CAFYM) -en representación de los armadores de Paraguay- y la Comisión Permanente de Transporte de la Cuenca del Plata (CPTCP) como la asociación que aglutina a los cinco países abarcados por la Cuenca del Plata.
El establecimiento de cobro diferenciado por el tramo que va entre Santa Fe y Confluencia había generado un fuerte reclamo de parte de Paraguay.
«Adicionalmente, serán beneficiados con un crédito a su favor las empresas que ya hayan abonado la totalidad de la tarifa que se encuentra activa desde inicios del año 2023. La misma corresponde al trabajo de mantenimiento realizado en el tramo, que comprende el balizamiento, los ajustes de traza necesarios y las obras de dragado puntual, entre otros trabajos realizados», comunicaron desde la Administración General de Puertos.
Hidrovía: el trasfondo del acuerdo entre Argentina y Paraguay
Según marcan fuentes gubernamentales, el proceso de entendimiento estuvo mediado por la Cancillería Argentina y la de Paraguay, así como por el Ministerio de Economía de la Nación y la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, a cargo de Iñaki Arreseygor.
El acta de entendimiento que se firmó por estas horas crea dos Mesas de Trabajo: una Ejecutiva, para monitorear el cumplimiento del entendimiento operativo entre las partes; y una Técnica, para el estudio de los mejores criterios de mantenimiento de la Vía Navegable Troncal en dicho tramo.
La gestión del Frente de Todos terminó enfrentada con el presidente paraguayo. No solo por la aplicación del peaje en sí, sino por la supuesta promesa de suspender ese cobro que el entonces ministro de Economía, Sergio Massa, había hecho en una audiencia con Santiago Peña. Eso desembocó a que el mandatario dijera ante medios argentinos: «Probablemente no le compraría un auto usado a Sergio Massa».
«Salimos de la reunión pensando que teníamos un entendimiento. Tenemos con la Argentina una larga historia de amores y desamores. Este puede ser un capítulo más de desamor, o paso para la integración que Paraguay y Argentina necesitan trabajar juntos», sostuvo Peña en diálogo con LN+.