La justicia formoseña condenó a periodistas a pagar 2 millones de psos a Gildo Insfrán. Hablan los condenados.
Por Diego Rojas (@zonarojas)
La justicia formoseña acaba de condenar al pago de dos millones de pesos a unos periodistas formoseños que, en un programa de radio, permitieron que un oyente anónimo expresara una opinión que el gobernador Gildo Insfrán consideró ofensiva para su persona. De este modo, la acción judicial iniciada por el gobernador kirchnerista -caracterizado en reiteradas oportunidades como “autoritario”- obtuvo una sentencia que podría actuar como una mordaza para los medios de comunicación de la provincia, y sentar un antecedente grave para el periodismo en general.
La mañana del 21 de enero de 2013 en el programa “Mano a mano” que emite radio Fantasía y que conduce el ex intendente radical Gabriel Hernández -que además de periodista es abogado- un oyente anónimo llamó y en su intervención contó una historia que es un rumor, muy probablemente falso, que recorre la sociedad formoseña acerca de una tragedia familiar del gobernador. La grabación llegó a los oídos de Insfrán, que inició una causa por daños y perjuicios contra el periodista y su esposa, Paola Cóspito, coconductora del ciclo. Luego, la causa se extendió al periodista Julián González que en su diario Opinión Ciudadana reflejó la polémica y a los dueños de la emisora donde se pasaba el programa. Según la jueza Giselle Verónica Drovandi, todos solidariamente deberán resarcir al gobernador Insfrán pagándoles dos millones de pesos.
“Mi programa era el único que le daba micrófono abierto a la audiencia y se caracterizaba por esa libertad -cuenta a Border Gabriel Hernández-. Ese día yo acababa de pasar un audio de Nora Cortiñas, la madre de Plaza de Mayo, que decía que Gildo era un asesino por la represión a los qom. Luego abrí el micrófonó y un tipo, cuya identidad desconozco, llamó y dijo que estaba de acuerdo con Nora Cortiñas y decía que era responsable por su tragedia familiar. Yo no dialogué con él ni comente lo que había dicho y pasé al siguiente oyente. Ese fin de semana Antonio “Pomelo” Ferreyra, mano derecha de Insfrán, salió con los tapones de punta a decir que me había prestado a un agravio incalificable contra el gobernador,y otros funcionarios hicieron lo mismo. Luego Gildo nos mandó su demanda. Incluso demandó a mi mujer, que en ese momento no estaba en el estudio porque había viajado a Buenos Aires. La jueza también la condenó a ella”.
En su extensa resolución de condena, la jueza brinda una lección personal de periodismo: “Los medios de prensa y quienes trabajan en ellos como comunicadores públicos –tal como aquí nos ocupa- deben transmitir información acorde a los principios de veracidad, objetividad, seriedad, actualidad y respetar el interés general prevaleciente. Ello es extensible a los casos en que se entrevista o interactúa con un invitado en un programa ‘en vivo’, no pudiendo excluirse de la responsabilidad alegando ser meros transmisores de versiones u opiniones de terceros”, dice la jueza. Y prosigue, justificando la condena: “No es cierto que por dichos de terceros que hablan y opinan en su programa, difamando o entrometiéndose en la vida de las personas, arbitrariamente y sin justificación alguna, el conductor demandado, no sea responsable. También por omisión, su conducta merece reproche. Y ello ocurre cuando el periodista, el conductor, etc., asume una actitud pasiva frente al invitado, en el caso un oyente, y omite impedir que se continúe con las manifestaciones difamatorias, injuriosas, intrusivas, u omite expresar no compartir tales expresiones, aclarar su posición al respecto o utilizar alguna forma expresiva que no deje lugar a dudas que no está alentando o avalando lo que dice el entrevistado u oyente”
La jueza Drovandi señala que a la hora de definir el monto de la condena tuvo en cuenta los antecedentes de Gildo Insfrán: “las condiciones personales de la víctima, tal como la actividad pública que lleva adelante desde hace ya muchos años de manera intachable y por elección del voto popular del pueblo de la Provincia de Formosa. (…) no solo para determinar el alcance de la reparación, sino también de desalentar conductas lesivas de ese tipo en el futuro”. De este modo, admite que su intención es crear un “efecto mordaza”.
-¿Por qué creen que puede haber sido una cama?
-La salida al aire se produjo el 21 de mayo. El 19 Insfrán mandó a un alto funcionario a una escribanía para certificar la orden para que se grabe mi programa. O se blanqueó con la escribanía el sistema de monitoreo policial de todo lo que publica la prensa o se trata de una cuestión armada.
Julián González, director del diario Opinión Ciudadana y también condenado, agrega: “Todo es un absurdo. A Gabriel lo condenan por no opinar, a Paola por no estar presente durante los acontecimientos y a mí por transcribir lo que había sucedido. Es un intento más de perseguir a la prensa que realiza Gildo”.
Los condenados anunciaron que apelarán la decisión de la jueza.