“Es de película”. Asé describieron fuentes judiciales la fuga de un adolescente en conflicto con la ley penal que estaba alojado en el instituto de menores Gregorio Araoz Alfaro ubicado al oeste de la ciudad de La Plata. Se trata de un joven de 16 años que estaba privado de su libertad por el delito de robo. Los datos de él se mantendrán en reserva ya que se trata de un menor de edad.
El caso fue denunciado este fin de semana por el propietario del auto. Según se desprende de la documentación judicial a la que accedió Borderperiodismo, el empleado del área de mantenimiento, al finalizar su jornada laboral, se retiró del predio rumbo a un comercio ubicado a unos 11 kilómetros de distancia. Mientras esperaba ser atendido escucha la alarma de su Fiat Siena. Sale a la puerta del local y observa al menor cuando bajaba de la parte trasera del rodado y se va corriendo del lugar.
La pregunta que le hicieron los investigadore fue “cómo hizo para subirse el menor al vehículo”. La respuesta no tardó el llegar: “Dejé el auto abierto cuando llegué a trabajar”, señaló el denunciante. En este punto de la historia hay dos versiones, una indica que el menor se bajó de la parte trasera del auto, otros señalan que lo hizo desde el baúl.
Según consta en el expediente judicial estaba detenido en el instituto desde el 8 de febrero de 2024 a disposición del Juzgado de Garantías del Joven 3 de La Plata por un hecho de robo registrado a fines de 2023.
Esta nueva evasión se suma a la larga lista de casos que se registraron en los últimos meses. Los centros de detención para jóvenes en conflictos con la ley dependen, en la provincia de Buenos Aires, del ministerio de Desarrollo de la Comunidad a cargo del kirchnerista Andrés “Cuervo” Larroque. La funcionaria a cargo de minoridad es la subsecretaria de Responsabilidad Penal Juvenil, Viviana Arcidiácono, quien tras la nueva fuga dio la orden de “revisar baúles” de los autos de trabajadores “a la entrada y a la salida” de los predios, señalaron fuentes del caso.
Sobre el paradero del menor, por el momento es desconocido. Las fuentes consultadas no pueden confirmar si fue nuevamente capturado. La hipótesis más firme que tienen es que la familia lo mantiene escondido. El adolescente tiene domicilio en la zona norte del Gran La Plata.
Según establece el marco legal vigente, los centros de alojamiento de menores, deben cumplir una extensa serie de requisitos con el objetivo de resocializarlos. Educación, prácticas deportivas, recreación y alimentación, son cuatro de los ejes vertebradores en los que se debe trabajar en el proceso de recuperación social, siempre según establece la normativa que rige en la materia.
El instituto Araoz Alfaro está ubicado sobre la avenida 520 casi en el cruce con la autovía 2, en la localidad de Abasto. En rigor su nombre actual es “Nuevo Dique” pero el lugar quedó inmortalizado por su denominación de bautismo en homenaje a un médico sanitarista que luchó por el acceso de los jóvenes a la salud.
HAMBRE, FRÍO Y CASTIGO
La grave situación de los institutos de menores no es nueva. Desde hace varios años tramita un voluminoso habeas corpus sobre otro complejo (Almafuere) donde se denuncian irregularidades de todo tipo en los centros de detención para menores de entre 16 y 18 años de edad que por diferentes motivos están privados de su libertad.
Según un informe pericial los chicos reciben la mitad de la ración diaria de comida y muchas veces deben consumirlas frías, tal como informé Borderperiodismo. Pero este reclamo va más allá y pone la lupa en las condiciones bromatológicas de los alimentos. Se sospecha que los alimentos, en reiteradas oportunidades, no son aptos para el consumo.
En diciembre de 2023, la justicia intimó al gobierno bonaerense a mejorar la alimentación, garantizar los talleres de capacitación, reparar las celdas en desuso, garantizar “el acceso al aire libre” (salidas al patio del predio) y que se informe el listado de docentes que dictan clases, bajo sanción de multar a los funcionarios provinciales Germán Urman y la mencionada Arcidiácono.
PANORAMA PROVINCIAL
En la provincia de Buenos Aires hay ocho centros cerrados para jóvenes en conflicto con la ley penal y 14 centros de contención, donde los acusados o condenados cumplen medidas de privación de la libertad en distintas modalidades.
En el mes de noviembre del año 2019 la jueza María José Lescano, del fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de La Plata, hizo lugar a un amparo presentado por todos los defensores oficiales de la capital bonaerense ante las malas condiciones de detención de los adolescentes alojados bajo la tutela del Estado.
Las falencias en los centros de detención son innumerables. No está garantizado el proceso educativo, comida escasa, cloacas desbordadas, pocos policías para custodiar las salidas y pocos asistentes adentro. Esta cruda radiografía es la escenografía en la que los jóvenes deben “resocializarse” para recuperar la libertad, una vez cumplida su pena.
